A este paso no hay hoteles bastantes para acoger a tanto inmigrante ilegal

hoteles inmigrantes

La solución que ha encontrado el Gobierno en funciones para paliar la creciente llegada de inmigrantes irregulares -en Canarias viven una situación de auténtico colapso- no deja de ser un parche en toda regla: repartirlos por distintos puntos de la península como si fueran mercancía y alojarlos en hoteles. El problema es que la llegada de inmigrantes a Canarias cada día se cuenta por centenares y a este ritmo no va a haber suficientes hoteles para hospedarlos. Como viene informando OKDIARIO, tras llegar en avión, los inmigrantes son repartidos en autobuses por varias comunidades autónomas -como Aragón, Extremadura o Andalucía-, donde se les aloja en albergues e incluso hoteles o balnearios.

El plan del Ejecutivo se traza en una resolución de la Dirección General de Atención Humanitaria del Ministerio de Inclusión Social, revelada por OKDIARIO, que prevé que los traslados de los inmigrantes más vulnerables a estos establecimientos turísticos continúe al menos hasta «el 30 de abril de 2024». Según el Gobierno, «estas plazas posibilitarán incrementar las derivaciones desde las islas, ya que en la actualidad los centros de acogida abiertos en península (incluso los CAED, que son los dispositivos que se utilizan para un primer acceso a la acogida de los grandes contingentes de personas migrantes llegadas a costas) tienen una ocupación del 80 %. Estas altas ocupaciones impiden programar traslados desde Canarias de forma ágil», se recoge en el documento.

Según el último balance de Interior, 36.814 inmigrantes ilegales habían llegado a España, bien por vía marítima o terrestre, hasta el pasado 15 de octubre, pero sólo en lo que llevamos de mes han llegado a Canarias unos 13.000 inmigrantes. El incremento es exponencial y el plan del Ejecutivo amenaza con saltar por los aires, porque el problema no se resuelve dispersando inmigrantes, sino elaborando un plan creíble en función de la capacidad de acogida de nuestro país. Que es, obviamente, limitada. O se ataja el problema de fondo o a este paso ponemos el cartel de completo en todos los hoteles de España.

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