El futuro de Álvaro Carreras ha encendido una inesperada rivalidad institucional entre el Real Madrid y el Benfica. No obstante, dicho caso podría acabar en las próximas semanas… y en Estados Unidos. En el próximo Mundial de Clubes de la FIFA, la entidad de Chamartín podría hacerle una ‘vendetta’ al equipo lisboeta. La clave está en una normativa poco conocida, pero que podría cambiar el rumbo de este culebrón.
La FIFA permite a los 32 equipos participantes en el Mundial de Clubes efectuar hasta tres cambios en sus listas de convocados de cara a la segunda fase del torneo, es decir, a partir de los octavos de final. Este detalle, que suele pasar inadvertido, se ha convertido en el as bajo la manga del Real Madrid. Si el Benfica, que ya ha inscrito a Carreras para la competición, opta por no alinearlo en la primera ronda, el club blanco podría adelantarse y ejecutar la cláusula de rescisión del lateral gallego a partir del 1 de julio de 2025, fecha en la que se habilitan estas modificaciones en las plantillas.
En ese escenario, el Real Madrid tendría la posibilidad de incorporar a Carreras justo en el momento decisivo del torneo, dejando al Benfica sin margen de reacción. La operación sería completamente lícita: al abonar la cláusula, el club lisboeta no podría oponerse ni negociar condiciones, perdiendo así a una de sus piezas clave en plena competición internacional.
Cabe destacar un aspecto crucial: para que el Real Madrid pueda incorporar a Álvaro Carreras en la fase eliminatoria del Mundial de Clubes, el equipo madridista debe finalizar como primero de su grupo. Los blancos compiten en el grupo H y, si logran el liderato, disputarían los octavos de final el 1 de julio, fecha en la que sería posible inscribir al jugador. Sin embargo, si terminan en la segunda posición, el partido de octavos se jugaría el 30 de junio, lo que impediría la inscripción de Carrereal mras para la etapa decisiva del torneo.
El Madrid no dejará tirado a Carreras
El Real Madrid mantiene su compromiso firme con Álvaro Carreras y no contempla dejar al lateral gallego en la estacada, a pesar de las dificultades impuestas por el Benfica en la recta final de su fichaje. Los lusos no fueron galanes con Chamartín y la situación ha generado desesperación tanto en el entorno del jugador como en el club blanco.
Álvaro Carreras, tras disfrutar de sus vacaciones en su Ferrol natal, aguardaba con ilusión el visto bueno definitivo para incorporarse al Real Madrid. Sin embargo, la falta de avances en las negociaciones y la grave crisis institucional que atraviesa el Benfica sumieron la operación en una situación de incertidumbre. Esta parálisis obligó al lateral gallego a subirse al avión hacia Estados Unidos para disputar el Mundial de Clubes con el cuadro portugués.
En la capital española, todos están conscientes de que el pulso del Benfica solo perjudica al futbolista e insisten en que no romperá la operación bajo ningún concepto. «Será jugador del Real Madrid, antes o después», es la consigna que se repite en las entrañas de Valdebebas, que ya ha aparcado este fichaje hasta el 1 de julio y centró toda su atención en otros objetivos, como el de Franco Mastantuono.
