Con este Gobierno los niños ya no vienen con un pan debajo del brazo

«INSS informa. Su prestación por nacimiento y cuidado de menor ha sido aprobada. La resolución se envía exclusivamente por medios telemáticos. Consulte la resolución en el Registro Electrónico de notificaciones”. Con este escueto mensaje, la Seguridad Social confirma que la Administración ha registrado la condición de baja por maternidad y paternidad. A partir de ahí, a esperar, porque los pagos a los progenitores con recién nacidos se están demorando por espacio de dos meses o más, espacialmente en Madrid, con el consiguiente quebranto económico para miles de ciudadanos.
La cuantía de este permiso debe ser el 100% de la base reguladora que esté establecida para la prestación por incapacidad temporal derivada de contingencias comunes. En el caso de los autónomos, estos trabajadores tienen la cuota totalmente bonificada mientras dura el permiso por paternidad, que queda exenta de retenciones del IRPF. Es el Instituto Nacional de la Seguridad Social quien debe pagar el salario del empleado. mientras la empresa se hace cargo de los seguros sociales del trabajador. En definitiva, que quien paga la ‘nómina’ es la Seguridad Social, por lo que cada mes de retraso los beneficiarios de la prestación no reciben ingreso alguno.
El Gobierno vendió a bombo y platillo la ampliación de la baja de maternidad y paternidad, pero la realidad es que está fallando de manera calamitosa a la hora de abonar las cuantías. Se han organizado chats en las redes sociales en los que los afectados por las demoras intercambian opiniones y muestran su inquietud por una situación que les obliga literalmente a buscarse la vida.
La desesperación va en aumento, pues el pago de la Seguridad Social es el principal sustento que tienen las familias. Lo normal sería que el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) materialice el pago el último día hábil del mes. Y que en caso de que el último día del mes fuera festivo o fin de semana, el pago se realizara el día hábil inmediatamente anterior. Pues no. En el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social alguien ha debido pensar que un retraso de dos meses o más entra dentro de lo normal. No es una cuestión de tener un poco de paciencia, sino de mera subsistencia, porque son muchos los que no puede permitirse el lujo de tirar de los ahorros hasta que la Administración tenga a bien pagar. Dicen que los niños vienen con un pan debajo del brazo. No será por la Seguridad Social.