Esto es lo que le puede pasar a tu perro si come chocolate: lo que debes saber

Si tienes un perro como animal de compañía, debes saber que hay algunos alimentos «de humanos» que puede comer, pero el chocolate no es uno de ellos. Para que tenga un buen estado de salud, tienes que proporcionarle una alimentación equilibrada y de alta calidad que esté formulada para sus necesidades específicas según la edad, el tamaño y el nivel de actividad.

Además de la comida que le des a diario al perro, de vez en cuando puedes darle otros alimentos a modo de premio cuando hace algo bien. Sin embargo, evita el chocolate a toda costa porque este producto tiene un alto contenido en teobrobina, una sustancia que el organismo de estos animales no puede metabolizar adecuadamente y, por lo tanto, es muy peligrosa para ellos.

El chocolate es peligroso para el perro

Si no ha comido demasiado chocolate, tendrá dolor estomacal. Sin embargo, si ha ingerido mayor cantidad o el grado de pureza del chocolate es elevado, puede sufrir vómitos y diarrea. En los casos más graves, la teobrobina puede provocar aceleración del ritmo cardíaco, convulsiones, temblores musculares, hemorragias internas, e incluso la muerte.

Los primeros síntomas de la intoxicación aparecen entre las 4 y las 12 horas. Si en este plazo de tiempo empiezas a notar que el perro sufre temblores y se muestra agitado, tienes que llevarle al veterinario a la mayor brevedad. Es muy posible que tengan que hacerle un lavado de estómago para eliminar la sustancia tóxica del organismo.

Cabe señalar que la cantidad de teobromina varía según el tipo de chocolate. El chocolate negro tiene la mayor cantidad, seguido del chocolate con leche y el chocolate blanco. Ahora bien, cualquier tipo de chocolate puede ser peligroso para los perros si se consume en grandes cantidades.

Otros alimentos prohibidos

Además del chocolate, hay otros alimentos que los canes no deben consumir nunca:

• Uvas y pasas: incluso en pequeñas cantidades, pueden causar insuficiencia renal en los perros.
• Cebolla y ajo: independientemente de si están crudos o cocinados, pueden dañar los glóbulos rojos de los perros y provocar anemia.
• Nueces de macadamia: pueden provocar vómitos, temblores, fiebre y debilidad en los perros.
• Huesos cocidos: pueden astillarse y causar obstrucciones o desgarros en el tracto gastrointestinal de los perros.
• Aguacate: contiene una sustancia llamada persina que puede ser tóxica para los perros en grandes cantidades.
• Lácteos: algunos perros son intolerantes a la lactosa y pueden sufrir malestar gastrointestinal si consumen grandes cantidades de lácteos.