Así fue la patada de Errejón en el estómago a un enfermo de cáncer de colon de 67 años

Las imágenes captadas por la cámara de vigilancia del Ayuntamiento de Madrid, instalada en la esquina de la calle del Salitre con la calle de la Fe, dieron origen a la diligencia ordenada por el juzgado de Instrucción número 16 de Madrid. La juez ha pedido un aclarado de esa grabación por parte de Policía Científica. Esa grabación esconde el momento exacto de la patada en el estómago que el 2 de mayo el diputado nacional Íñigo Errejón le propinó a un vecino de Lavapiés, jubilado y en proceso de recuperación de un cáncer.

Se trataría de intentar confirmar si puede verse en algún momento o identificar al diputado y portavoz de Más País, Íñigo Errejón, tal y como denunció en comisaría el 3 de mayo de madrugada A.D.C., un jubilado vecino de 67 años.

La imagen que trata de esclarecer en concreto la juez Margarita Valcarce se produjo a las 22 horas 58 minutos y 37 segundos del pasado 2 de mayo y en ella se ve un movimiento de personas, en la esquina superior derecha. Es difícil distinguir si es una patada propinada por un hombre a otro u otro tipo de movimiento, pero está claro que algo sucede en esa parte de la grabación.

Dos minutos antes, otra cámara, según ha podido conocer OKDIARIO, recoge como el diputado acompañado de dos varones, llega justo a esa calle. Esas dos personas son las mismas que después se lo llevaron casi en volandas del lugar, a pesar de que Errejón se resistió hasta en tres ocasiones girándose hacia la esquina con la calle Buenavista donde, siempre según el denunciante, ocurrió la agresión. Según Errejón, sin embargo, el roce fue rápido, sin importancia y ausente de toda violencia. Su reacción no se ajusta a esa descripción.

«No fue una patada violenta»

La ropa que llevan puesta todos los protagonistas del vídeo coincide con la descrita por la víctima. Además, las circunstancias que parecen apreciarse en las imágenes son similares a las declaradas por el denunciante, que ya ratificó el pasado día 24 de junio ante la juez que “no fue una patada muy violenta” y que no le derribó, lo mismo que contó en una entrevista con OKDIARIO. Efectivamente en estas imágenes no parece que nadie caiga al suelo, aunque sí se aprecia un desplazamiento de personas en el momento exacto que coincidiría con la patada.

Tras este movimiento de personas, unos segundos después se ve en la misma imagen a un repartidor de comida a domicilio de Uber Eat, un rider en bicicleta, a quien la Policía busca todavía para intentar que preste su testimonio.

Según el atestado policial el 7 de mayo de 2021 “se solicita la identificación del repartidor o “rider” que aparece en las imágenes (…) para ser oído en declaración como posible testigo de los mismos, permaneciendo a la espera de la contestación de esta entidad (Uber Eat)”.

La víctima de momento cuenta con la declaración del vecino con el que se encontró minutos antes en la calle y la juez espera que acuda próximamente el otro vecino localizado por la Policía durante sus pesquisas y que no tiene relación alguna de amistad con la víctima, pero que se cruzó de casualidad con la escena y con Íñigo Errejón y sus dos acompañantes cuando abandonaban el lugar.

Mientras todo esto ocurría, era otro hombre -acompañante de la víctima- quien llamaba al 091 para pedir la presencia de una patrulla de la Policía, que cuando se personó en Lavapiés ya no pudo tomar declaración al diputado Íñigo Errejón ni a sus acompañantes, puesto que ya se habían marchado. Otra vecina que salía de casa de su madre tras visitarla también llamó a la misma hora a la Policía ante el escándalo montado en la calle. Esa llamada al 091 quedó reflejada en el atestado realizado por el subgrupo de Delitos contra las Personas de la Comisaría Centro, en Madrid.

Los agentes de Policía que acudieron al lugar recomendaron al agredido acudir a Comisaría a denunciar, lo que hizo a las 1.08 horas del 3 de mayo.

La Policía no pudo hablar con el grupo que iba con Íñigo Errejón ni con el diputado, porque éste en medio de sus dos acompañantes dejaba el lugar por la calle de la Fe en dirección a la calle de Salitre, acercándose a la cámara que grabó las imágenes obtenidas por OKDIARIO en exclusiva.

Ese minuto final recogió las imágenes más clarificadoras que existen de aquella noche, tanto por la actitud de Íñigo Errejón, que no parece nada conciliadora, como por la de sus acompañantes que le llegan a tomar de un brazo para conminarle a dejar el lugar, a lo que el político se resiste. Eran las 23 horas 3 minutos y 40 segundos.