Policías y guardias civiles a Belarra tras llamarles fascistas: «Pero luego no renuncia a nuestra escolta»
La diputada podemita dijo en Torre Pacheco que en la Policía y la Guardia Civil "hay ideología neofascista"


Los policías nacionales y guardias civiles están que trinan con las declaraciones de la líder de Podemos, Ione Belarra, este martes en Torre Pacheco (Murcia). «Bien que se beneficia de nuestra escolta y no renuncia», le replican los agentes desde OKDIARIO.
La diputada podemita se ha plantado en este municipio murciano, en la picota por graves disturbios, a buscar culpables y lo ha hecho asegurando que «tenemos un serio problema de infiltración de la ideología neofascista tanto en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado como en una Justicia en España que no funciona igual en función del color de piel».
Sindicatos de la Policía Nacional y asociaciones de la Guardia Civil y de jueces dan respuesta en OKDIARIO a las palabras de Belarra, ante las que muestran su «más absoluto rechazo», preocupados por que los ciudadanos les pierdan el respeto, ya que el poder político es el primero que no los respeta.
Desde Jupol, el sindicato mayoritario de la Policía Nacional, destacan que «en un momento en el que lo responsable y necesario sería contribuir a la calma y a la convivencia, Belarra ha preferido utilizar su púlpito político para agitar el avispero, lanzando acusaciones muy graves y completamente infundadas contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y contra los jueces».
Jupol «lamenta profundamente que, una vez más, se ponga en duda el trabajo de los policías que, con profesionalidad y neutralidad, actúan en situaciones complejas para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos, sin distinción de origen, ideología o condición social».
Denuncia que es «inadmisible» que «desde una posición de responsabilidad política se alimente la crispación y se señale públicamente a los agentes, especialmente cuando lo que se requiere es respaldo institucional, apoyo a la labor policial y altura de miras para contribuir a la convivencia y al respeto al Estado de Derecho».
Desde Jupol exigen a Belarra una rectificación inmediata y que «deje de utilizar a los policías en su discurso político». «Los agentes merecen respeto, no ser el blanco de ataques injustificados por parte de quienes deberían estar comprometidos con la legalidad, la verdad y la convivencia democrática», subraya.
Más cómoda fotografiándose con etarras
El Sindicato Unificado de Policía (SUP) «niega categóricamente las graves acusaciones de Ione Belarra». «Tanto los compañeros de Guardia Civil como los policías nacionales somos garantes de la Ley y actuamos para restablecer el orden cuando, como en Torre Pacheco, se enfrentan grupos violentos sin mirar ni valorar jamás ideologías ni partidismos», deja claro este sindicato que estudia una querella contra Belarra tras estas «graves acusaciones».
Al SUP estas «falaces aseveraciones» no les resultan «ni extrañas viniendo de alguien que se siente más cómoda fotografiándose con ex miembros de organizaciones terroristas que con miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad».
La Confederación Española de Policía (CEP) afirma que «el verdadero problema lo tenemos con una formación política que desprecia, insulta, injuria y calumnia a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad». «Nos vincula con el fascismo, pero disfruta de nuestra escolta y no renuncia a ella», le espeta Víctor Martínez Vigil, secretario general del sindicato, señalando que Podemos que «trata de cuestionar la profesionalidad de los agentes, pero exigía y reclamaba un dispositivo estático permanente en el domicilio de sus líderes, para evitar que quienes protestaban se acercasen a su chalet para evitar ese jarabe democrático, como ellos mismos llamaban y que practicaban cuando aún no tenían responsabilidades políticas».
Al CEP le «indignan» las declaraciones de Belarra, pero no le extrañan ya, «porque algunos han hecho del señalamiento a los policías una práctica tan habitual como abyecta». «Lo único que reclamamos desde CEP es que dejen de arrastrarnos al fango de la política más chusca y barata», declara Víctor Martínez.
Jucil, la asociación mayoritaria de la Guardia Civil, replica a las declaraciones de Belarra reafirmando el compromiso de la Guardia Civil «con la legalidad, la neutralidad y la convivencia pacífica». Y afirma que en momentos delicados como los que vivimos en Torre Pacheco, «se debe cuidar el tipo de mensajes que se lanzan y evitar aquellos que polarizan y socavan la autoridad de los Cuerpos de seguridad».
«La Guardia Civil no busca confrontación, sino soluciones. Por eso, pedimos respeto institucional y llamamos a los responsables políticos a ejercer sus funciones con altura de miras, evitando discursos que alimenten la división», declara el líder de la asociación, Ernesto Vilariño.
«Primero de totalitarismo»
Fernando Portillo, presidente de Foro Judicial Independiente (FJI), conocido en redes sociales como Judge the Zipper, afirma que estamos» ante el discurso populista y antisistema propio de políticos irresponsables que no hacen otra cosa que señalar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y al Poder Judicial, cuyas funciones son precisamente las de proteger a esos mismos ciudadanos y sus derechos».
FJI indica que si desde instancias oficiales o desde instituciones públicas unos se dirigen a deslegitimar a un Poder Judicial o a atacar tildando de «neonazis» a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, lo que están haciendo simple y llanamente es «lanzar a la ciudadanía un mensaje de desconfianza hacia sus jueces y hacia su policía». Y declara que esa desconfianza que se quiere implementar en la ciudadanía contra quienes tienen la función de servirles «es de primero de totalitarismo, es la primera fase para implementar un régimen totalitario donde no exista un Poder Judicial que pueda servir de contrapeso frente a los abusos del poder político». Por tanto, las considera «muy lamentables» por «equivocadas y por perniciosas».
Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) denuncian que las afirmaciones de la secretaria general de Podemos «no solo son injustas, sino profundamente ofensivas hacia quienes dedican su vida a proteger los derechos y libertades de todos». «No se puede construir convivencia desde la desconfianza ni levantar un discurso político sobre la deslegitimación de los servidores públicos», subraya el secretario general de la AUGC, Juan Fernández Fernández.
Criminaliza por intereses partidistas
La AUGC recuerda a la diputada de Podemos que la Guardia Civil está formada «por hombres y mujeres que, con vocación de servicio, desempeñan su labor con escrupuloso respeto a la Constitución, a los derechos fundamentales y a la legalidad vigente». Y le advierte que «criminalizar al conjunto del Cuerpo por intereses partidistas es una irresponsabilidad que erosiona la confianza institucional y pone en riesgo la autoridad de quienes, precisamente, trabajan para preservar la paz social».
La AUGC, asociación decana en la Guardia Civil, ponen en valor que en estos momentos tan delicados, «mientras algunos agitan el enfrentamiento desde los platós o los escaños», cientos de agentes están desplegados sobre el terreno, lejos de sus familias, «trabajando sin descanso día y noche, conteniendo situaciones extremadamente complejas y evitando enfrentamientos violentos, así como controlando accesos y velando por la seguridad». Y lo hacen «con profesionalidad, humanidad y sentido del deber, aunque a veces se les niegue el reconocimiento que merecen».
Desde la AUGC llaman a la calma, a la sensatez y a la responsabilidad política. «Quienes siembran sospechas sobre los cuerpos policiales en un contexto tan tenso no sólo desinforman, desprotegen. Lo urgente hoy no es alimentar bandos, sino garantizar la seguridad y la convivencia de todos los ciudadanos. Apoyar a quienes están en primera línea no debería ser una cuestión de ideología, sino de Justicia», destaca esta asociación.
La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) también denuncia que las declaraciones que ha hecho Belarra sobre la Guardia Civil son «muy graves e irresponsables y están fuera de lugar».
«Con este tipo de exposiciones, en lugar de enfriar el conflicto, está echando gasolina, porque acusar a una institución como es la Guardia Civil de estar infiltrada de neofascistas es un tema muy delicado y más viniendo de una diputada», critica Francisco Javier Benito Molina, presidente de la AEGC, que espera «una pronta y pública declaración de la directora general en defensa de las mujeres y hombres» de la Benemérita.