Un francotirador británico mata a cuatro terroristas del ISIS de un solo disparo y salva a 12 rehenes
Vale, el título tiene trampa. Pero es impresionante y, en parte, verdad. A ver, el francotirador efectivamente hizo un solo disparo. Y los malos del ISIS eran efectivamente cuatro. Y murieron todos. El caso es que uno de ellos portaba un lanzallamas y lo que hizo el nuevo héroe del SAS (Special Air Service, Servicio Aéreo Especial del Ejército británico) fue apuntar al depósito… y ¡pum!
El mérito está en que lo hizo desde 1.500 metros de distancia y la heroicidad está en que con su acción, necesariamente certera a la primera para cumplir la misión, salvó a 12 rehenes de los terroristas del autodenominado Estado Islámico, a los que éstos iban a quemar vivos. Si fallaba el tiro, se desvelaba su presencia, y los rehenes morirían. Si no acertaba de lleno al depósito, no morían todos los malos, y los rehenes morían.
Acertó. Murieron los cuatro terroristas. De un solo tiro. Y los 12 rehenes fueron rescatados sanos y salvos.
El francotirador británico disparó con una Barrett.50 cal, una sofisticadísima arma tipo fusil con potente mira telescópica y proyectiles de grueso calibre en una localidad cercana a Raqqa, capital autoproclamada del califato terrorista en Siria, a principios de este mes.
Tras impactar en el depósito del lanzallamas, la lo hizo explosionar en una enorme bola de fuego que envolvió a los cuatro militantes yihadistas, el encargado de la ejecución y los otros tres, que estaban allí para registrar su ‘obra’ en vídeo para elevarle a él a la categoría de héroe en las imágenes propagandísticas del ISIS.
Uno de los yihadistas abatidos, sospechoso de ser aficionado a ejecutar a civiles y combatientes enemigos con esta salvaje técnica de quemarlos vivos, estaba en la lista de objetivos a eliminar del Ejército británico desde hace meses.
Una fuente militar ha informado al Daily Mail que las eventuales víctimas eran 12 civiles –ocho hombres y cuatro mujeres– que iban a ser asesinados en el mismo instante en el que sus asesinos fueron abatidos. Los 12 rehenes estaban atados a estacas y atrapados en jaulas a la espera de su ejecución.