La empresa de los ‘buscas’ que mataron a terroristas de Hezbolá desvela que fueron fabricados en Hungría
Los buscas fueron fabricados por una empresa con sede en Hungría llamada BAC Consulting KFT
La empresa taiwanesa Gold Apollo, compañía a la que se le encargaron los buscas que causaron al menos 9 muertos y más de 2.000 heridos entre las filas de la organización terrorista Hezbolá, ha negado este miércoles cualquier vinculación con el incidente y ha revelado que estos aparatos fueron fabricados por una empresa con sede en Hungría llamada BAC Consulting KFT. Gold Apollo ha indicado, en un comunicado publicado en sus redes sociales, que mantiene «una asociación de larga data» con esta empresa y que, «según un acuerdo de cooperación», la compañía taiwanesa permite a la segunda «el uso de la marca para la venta de productos en regiones designadas». «El diseño y fabricación de los productos es responsabilidad de BAC», ha dicho.
Así lo ha asegurado el presidente la compañía asiática, Hsu Ching-Kuang, quien aseguró, durante una rueda de prensa en Taiwán, que los dispositivos empleados en las explosiones contra miembros del partido-milicia chií Hezbolá no fueron fabricados por Gold Apollo. Además el empresario ha anunciado que interpondrá una demanda internacional por todo lo ocurrido alegando que le han «arruinado».
En el comunicado publicado por la empresa taiwanesa se especifica que, en relación con el modelo AR-924 «aclaramos que este modelo es producido y vendido por BAC». «Nuestra compañía sólo facilita la autorización para el uso de la marca y no está implicada en el diseño o fabricación de este producto», han recalcado.
Además la empresa ha manifestado en su comunicado que «Gold Apollo Co. Ltd. siempre cumple con las regulaciones relevantes y mantiene asociaciones transparentes y compatibles con sus colaboradores».
Las explosiones
El atentado cuya autoría ha sido atribuida al Estado de Israel, habría sido pergeñado por el Mossad, la inteligencia de la nación judía, que lograron ocultar material explosivo dentro un lote de 3.000 buscas importados al Líbano y con la marca de la empresa taiwanesa.
Los aparatos portaban una cantidad de entre 30 y 60 gramos de explosivos que se alojaba junto a la batería y un sistema a control remoto que se detonó de forma simultánea una vez que estuvo en territorio libanés. Concretamente todos los buscas que estaban encendidos recibieron un mensaje a las 15:30 horas que provocó la detonación tras un pitido de varios segundos. Si bien ha habido 9 muertos y más de 2.000 heridos, de momento se desconoce cuántas personas afectadas son miembros de la organización terrorista chií.
Cabe decir que entre los heridos figura el embajador de Irán en Beirut, Mojtaba Amini. Desde la capital del Líbano, tanto el Gobierno como Hezbolá han vinculado lo ocurrido a Israel y han prometido una respuesta, si bien las autoridades israelíes no se han pronunciado, en medio de un repunte de los enfrentamientos que ha hecho temer con la posibilidad de una expansión del conflicto en Oriente Próximo.