California impone toque de queda durante un mes para intentar frenar el aumento de contagios
El gobernador de California, Gavin Newsom, ha decretado este jueves un toque de queda en la mayor parte del estado como medida para frenar la alta tasa de contagios registrada en los últimos días, medida que tendrá vigencia durante un mes, hasta el próximo 21 de diciembre.
La decisión de Newsom viene tres días después de que anunciara la vuelta a medidas más restrictivas debido al incremento de contagios diarios registrados en el estado, cuando ya aseguró que no descartaban imponer un toque de queda ante «el mayor incremento de casos desde el comienzo de esta pandemia».
En este sentido, finalmente se ha impuesto esta medida más restrictiva a través de una orden emitida por el Departamento de Salud Pública del estado, que entrará en vigor el próximo sábado y aplicará hasta el 21 de diciembre.
«El virus se está propagando a un ritmo que no hemos visto desde el comienzo de esta pandemia y los próximos días y semanas serán críticos para detener el aumento. Estamos haciendo sonar la alarma», ha asegurado Newsom, según declaraciones recogidas por el ‘Los Angeles Times’.
Este toque de queda prohíbe las actividades no esenciales fuera de casa desde las 22:00 hasta las 05:00 horas en los condados que se encuentran en el nivel más estricto del plan diseñado por las autoridades, en este caso, el nivel púrpura.
La estrategia de California establece diferentes niveles, con medidas más o menos restrictivas, basándose en el promedio diario de nuevos casos por cada 100.000 habitantes y el porcentaje de pruebas de detección realizadas.
El 94 por ciento de los habitantes del estado –aproximadamente 37 millones de personas– viven en estas zonas púrpura en las que se están aplicando las medidas más restrictivas.
Desde el jueves pasado, el estado ha contabilizado un total de cuatro registros de más de 10.000 casos diarios, cifras que no se alcanzaban desde el estallido de la pandemia.
Por esto, «es crucial que actuemos para disminuir la transmisión y ralentizar las hospitalizaciones antes de que aumente el número de muertes. Ya lo hemos hecho antes y debemos hacerlo de nuevo», ha pedido Newsom.
No obstante, y a pesar de que las autoridades estatales han pedido a las locales que hagan cumplir el toque de queda, no todos los condados han recibido bien esta nueva medida.
El sheriff del condado de Sacramento, Scott Jones, por ejemplo, ha asegurado que no haría cumplir «ninguna orden de salud o de emergencia relacionada con el toque de queda, la permanencia en el hogar, el Día de Acción de Gracias u otras reuniones sociales dentro o fuera del hogar, la ocupación máxima o los mandatos de enmascaramiento», tal y como informa ‘Politico’.
California es uno de los estados más afectados del país, que sigue siendo el que peores cifras ha registrado del mundo este lunes, con un total de 11.698.661 casos acumulados y 252.448 fallecidos a causa de la COVID-19.