El acuerdo con Israel causa rechazo en los partidos islamistas marroquíes
Por su parte, Argelia también ha rechazado el reconocimiento estadounidense de la soberanía marroquí del Sáhara
No todos en Marruecos han visto con buenos ojos la normalización de las relaciones con Israel a pesar del reconocimiento de la soberanía marroquí del Sáhara Occidental. Los grupos islamistas que lideran la política marroquí han rechazado de plano el acuerdo del rey Mohamed VI, pues consideran que ataca directamente a la causa palestina.
El que más ahínco ha puesto en la crítica ha sido la organización religiosa Movimiento para la Unidad y la Reforma (MUR), ligada al islamista Partido de la Justicia y el Desarrollo, al frente del gobierno de Marruecos – aunque con muy poco poder real – tras haber ganado las pasadas legislativas.
El MUR ha calificado la decisión de “deplorable”, y ha denunciado “la ocupación sionista de Palestina”. En su calidad de partido de gobierno, el PJD ha matizado las palabras de su brazo religioso, y ha apoyado la decisión de Rabat haciendo también hincapié en la postura de Mohamed VI respecto a la causa palestina. El PJD sí se alegró, sin matices, del reconocimiento estadounidense a la soberanía marroquí del Sáhara Occidental.
Otro de los grupos islamistas que se ha posicionado radicalmente en contra del acuerdo entre Marruecos e Israel, ha sido el movimiento islamista Justicia y Caridad, que se encuentra actualmente ilegalizado. Según su comunicado, el acuerdo supone una “puñalada por la espalda” para los palestinos.
Argelia, en contra
El principal rival de Marruecos en la región, y en lo respectivo al Sáhara Occidental, no en vano es el apoyo más importante del Frente Polisario, también ha rechazado el reconocimiento estadounidense este fin de semana. El ministerio de Asuntos Exteriores advirtió que la decisión de Estados Unidos “no tiene impacto legal, pues contradice las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”.
Desde Argelia se señala también que este reconocimiento tira al traste todos los esfuerzos llevados a cabo para alcanzar una solución para el conflicto del Sáhara Occidental y desescalar una situación que se ha vuelto a tensar en las últimas semanas.