Abascal responde al nuevo ataque de Maduro: «Sí, somos tus enemigos, torturador y psicópata»
El narcodictador venezolano Nicolás Maduro sigue haciendo gala de sus obsesiones en cada comparecencia pública, y una de las últimas en sumarse a esta lista es Santiago Abascal, el líder de Vox. El tirano caribeño volvió a mencionar a Vox entre los enemigos de su régimen, y esta vez el político español no se ha quedado en silencio. Maduro enumeró los miembros de lo que él llama «la internacional fascista», que ahora mismo conforman «Elon Musk, Bolsonaro, Milei, Noboa, el represor asesino de Bukele, Vox…». Y Abascal le ha dado la razón: «Sí, somos tus enemigos, torturador y psicópata, Nicolás Maduro».
El líder de Vox ha añadido en su contestación que «somos legión, en todas partes, los que queremos a Venezuela formando parte del mundo libre», enviándole un claro mensaje: «Tus días como tirano están contados».
La obsesión de Maduro con Abascal comenzó cuando, a raíz del fraude perpetrado en las elecciones del pasado domingo, el dirigente español analizó que «ni el más colosal fraude» puede tapar el «éxito» de la oposición en Venezuela, subrayando que los venezolanos hablaron «de forma rotunda e incuestionable».
Esas palabras, y la iniciativa para que 295 dirigentes, españoles y europeos, cuestionasen los resultados del pucherazo, llegaron a oídos de Maduro y merecieron que éste le lanzase la acusación de promover un «golpe de Estado» en Venezuela, junto a Álvaro Uribe Vélez de Colombia, el nazifascista sociopata de Milei y Bolsonaro», todos ellos, «dirigidos por el imperio norteamericano».
Maduro cargó contra este ataque, al que ha calificado de «golpe de Estado», y señalando, dice, la existencia de dos bandos. «Por un lado, el pueblo que quiere paz, democracia, prosperidad, progreso. Y por otro lado, élites llenas de odio con un proyecto contrarrevolucionario fascista», ha dicho el dictador. El líder venezolano también ha recordado la Presidencia interina de Juan Guaidó, que duró entre 2019 y 2023, y que según Maduro acabó en «daño al país, a los humildes y a la economía».