Limpieza

Cómo hacer un detergente casero para el lavavajillas

Ingredientes tan básicos como un poco de bicarbonato, agua y limón son suficientes para hacer un detergente casero para el lavavajillas.

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Aprende cómo hacer un detergente casero para el lavavajillas
Blanca Espada

El lavavajillas es un aparato cada vez más extendido en todas las cocinas, si bien es uno de los electrodomésticos más cómodos, ya que nos evita tener que lavar platos y cacharros de cocina a mano, pero ¿existe algún tipo de lavavajillas que sea natural y que podamos usar? Veamos ahora una guía de pasos en la que te explicamos Cómo hacer un detergente casero para el lavavajillas.

Entre los muchos remedios naturales que tenemos para usar en la limpieza del hogar, podemos recurrir a algunos que nos van a servir para usar como detergente que añadir al lavavajillas y de este modo dejar todo bien limpio, sin que además sufras problemas como el de la cal.

Pasos para hacer hacer un detergente casero para el lavavajillas

  1. Hacer un detergente casero para el lavavajillas es muy simple, pero primero se necesita tomar algunas precauciones. Evidentemente, no todos los aparatos son iguales, y no todos los platos son idénticos. El primer paso, por lo tanto, es conocer bien tu máquina: ¿funciona solo con tabletas? ¿Acepta también detergentes líquidos? Además, será útil consultar las indicaciones proporcionadas por el fabricante, normalmente indicadas en las instrucciones: de esta forma, evitarás dañar las partes delicadas de la máquina. Si persisten las dudas, el principio debe ser precautorio: es mejor abandonar la experimentación que encontrarse con sorpresas desagradables.
  2. Si has comprobado que tu lavavajillas admite que añadas un detergente líquido, puedes proseguir con el siguiente paso. Antes de utilizar el jabón casero que vas a preparar será bueno probar cada ingrediente individualmente, preferiblemente en platos o vasos que no sean particularmente valiosos, para probar su validez. De hecho, debe considerarse que el lavavajillas funciona a temperaturas mucho más altas que las del lavado de manos, un hecho que podría alterar o frustrar la eficacia de los ingredientes elegidos.
  3. Una vez que se ha completado la fase de verificación, ya podemos hacer nuestro lavavajillas casero. Para ello necesitarás un tazón mediano, por ejemplo, para la ensalada de frutas, y lo llenas con un vaso de bicarbonato de sodio.
  4. Luego continúa agregando agua caliente, hasta que hayas obtenido una mezcla suave pero no completamente líquida. En el caso que te hayas pasado con el agua puedes aumentar su consistencia agregando una cucharadita de sal.
  5. Finalmente, puedes agregar unas gotas de extracto de limón o una cucharada de jugo y mezclar de nuevo. En algunas variantes, puedes pensar en elegir otras esencias o aprovechar el jabón de Marsella líquido para potenciar su potencial desengrasante.
  6. Para el lavado, una cuchara de cocina de la solución preparada será suficiente.

Dado que este es un remedio casero para lavar los platos en el lavavajillas, los resultados podrían variar según la suciedad de los platos y la cantidad de ingredientes utilizados: con la experiencia, las indicaciones se pueden modificar según se desee. Para los primeros usos, puedes incluso alternar el detergente casero con el que solías utilizar.

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