5 datos sobre la Segunda Guerra Mundial que quizás no conocías

La Segunda Guerra Mundial fue uno de los acontecimientos más dañinos de la humanidad y uno de los hechos históricos más estudiados. En 1939 comenzó uno de los conflictos bélicos donde más personas murieron y otras muchas perdieron a familiares en todo el mundo. Una guerra global donde estuvieron implicadas todas las naciones más potentes de la época, convirtiéndose en la mayor guerra vivida por el hombre hasta el momento.

La guerra duró seis largos años donde Alemania, conducidos por Adolf Hitler, Japón e Italia, países que compusieron la Potencias del Eje, se enfrentaron a las potencias Aliadas, donde Gran Bretaña, Rusia y Estado Unidos tuvieron un papel fundamental.

Durante la Segunda Guerra Mundial se puso de manifiesto que el poder de un hombre como Adolf Hitler estuvo a punto de destruir a las potencias democráticas de todo el continente, gracias a un conocimiento del campo de batalla y de las estrategias belicistas de sus tropas. Un conflicto único que dejó datos realmente escalofriantes y sobre todo, vergonzantes para todas las naciones implicadas en la contienda.

Sacrificio de animales

Uno de los datos más impactantes de la Segunda Guerra Mundial fue la decisión de Londres de sacrificar a los animales del zoo de la ciudad. Mientras se libraban grandes batallas entre Aliados y alemanes en el frente, las ciudades europeas estaban siempre en alerta para no recibir ninguno de estos ataques en sus propias carnes y la política de Gran Bretaña tomó una decisión sorprendente.

Este sacrificio de animales respondía a una cuestión. Los británicos quisieron protegerse con todo y ante el estallido de la guerra mandaron sacrificar a los animales del zoo por temor que un ataque alemán destruyera la zona y dejara a los animales sueltos por la ciudad.

Proyecto Seal

Es conocida de sobra la experiencia de Estados Unidos en esta guerra. Los americanos permanecieron en retaguardia durante los primeros años de conflicto, sabedores de que en algún momento deberían intervenir. Pero como el conflicto se centralizó en Europa como en la Primera Guerra Mundial, los americanos esperaron pacientes para su intervención.

Mientras no se quedaron parados. Hace unos años se revelaron algunos documentos clasificados sobre estos año, en los que hablaba del Proyecto Seal. Este consistía en la prueba de Estados Unidos, junto con Nueva Zelanda, de la creación de las llamadas ‘bombas tsunami’ capaces de destruir ciudades costeras en pocos segundos.

Se tiene constancia que se probaron en Oceanía y en los mares del Pacífico más de 3.000 bombas tsunami para que estuvieran listas en cuanto Estados Unidos entrase en conflicto. Estas bombas se lanzaban junto a los arrecifes de coral de las costas oceánicas y levantaban una gran ola capaz de destruir todo a su paso.

No les hizo falta para el conflicto, pero sí utilizaron bombas nucleares diseñadas dentro del Proyecto Manhattan.

Hitler y el lago de Moscú

Según cuentan la historiografía de la época, Hitler y sus tropas eran capaces de arrasar todo lo que encontraban a su paso. La mayor batalla estuvo contra las tropas rusas, que a la postre sirvió para debilitar al ejercito alemán que no fue capaz de conquistas las heladas tierras de la estepa rusa.

Según el dictador la ciudad de Moscú, junto con Leningrado y Kiev, eran las tres ciudades más importantes para doblegar a la URSS,  y su empeño por destruirlas fueron constantes. El propio Hitler tenía planes muy oscuros contra la capital rusa y confirmó que, una vez sitiara la ciudad de Moscú la convertiría en un inmenso lago artificial que inundaría abriendo las esclusas del canal Moscú-Volga.

Además, Hitler pretendía no evacuar a la población y que todos murieran ahogados en esta tremenda inundación para evitar que se produjeran focos de resistencia.

El museo de Hitler

En este sentido, Adolf Hitler fue motivo de muchos de los planes más macabros de la historia durante esta Segunda Guerra Mundial.

Se conoce que los planes del dictador alemán eran los de destruir y aniquilar a los judíos por completo y no pararía hasta conseguirlo. Según los datos, más de un millón de niños judíos murieron durante el Holocausto Nazi, y el 3% de la población mundial durante el conflicto.

Con esto, Adolf Hitler, planeó rendir su particular homenaje a los judíos construyendo un «museo de una raza extinta» tal y como lo llamaría el dictador una vez hubieses acabado con todos los judíos del planeta. En él se exhibirían objetos y recuerdos judíos una vez que ya no existiesen.

Las espías de las SS

La SS era la guardia principal y los servicios de inteligencia alemanes que vivían para servir a Hitler y su régimen del terror. Durante la Segunda Guerra Mundial cualquier método era bueno para obtener información de los enemigos.

Uno de estos métodos llevó a las SS a crear un burdel especialmente dedicado a gente de alto rango y VIP. Pero este burdel era una trampa para todo aquél que quisiera traicionar a Hitler. Se instalaron más de 20 micros por todo el burdel, y las prostitutas que allí estaban habían sido debidamente entrenadas por la SS para sacar información.