Una soltera de ‘First Dates’ estalla contra su cita por su actitud: «No me ha parecido bien»
La soltera se sinceró ante las cámaras del equipo de 'First Dates'


No es ningún secreto que First Dates, poco a poco y con el paso del tiempo, se ha convertido en uno de los programas de televisión que más éxito continúa cosechando en Cuatro. Es más que evidente que este dating show cuenta con un equipo verdaderamente excepcional, ya que siempre saben cómo sorprender a todos y cada uno de los espectadores. En una de las nuevas entregas de First Dates tuvimos la oportunidad de conocer a Fermín, un profesor de música jubilado que venía desde Jaén. Entre otras tantas cuestiones, reconoció que la música continuaba siendo su vida: «Llevo coros, uno de Iglesia y otro de mayores», comentó. Tras haber disfrutado de un par de relaciones de aproximadamente cinco años, el soltero tenía ganas de encontrar a la mujer de sus sueños. Para lograrlo, decidió pasar por el restaurante más famoso de la televisión: «Yo antes era muy tímido, todo lo contrario a lo que soy ahora»
Su cita para esa noche era Ángela, una monitora de yoga y taichí de 65 años que también llegaba desde Jaén. Entre otras tantas cuestiones, reconoció que estaba abierta al amor: «Me quiero enamorar, no quiero estar sola», comenzó diciendo, y añadió: «No encuentro a una persona que se sienta a gusto conmigo». La primera impresión del otro no fue la mejor, ni mucho menos. El soltero quiso sincerarse al respecto ante las cámaras del equipo de First Dates: «Esperaba una mujer que no fuera obesa y ella no lo es. En ese sentido me ha parecido bien. Pero me ha parecido un poco mayor, me hubiera gustado más joven y con menos arrugas». Después de una de intercambiar unas primeras palabras, Laura Boado no dudó un solo segundo en acompañar a los solteros hasta la mesa que tenían reservada para poder disfrutar de la velada. Un encuentro que comenzó con un sorprendente malentendido.
Todo comenzó cuando Ángela quiso saber cuántos años tenía el jienense, y él se mostró realmente contundente: «Yo la edad no la digo». Aun así, le propuso intentar adivinarlo. Ella respondió: «No soy buena, no quiero hacerlo por si me paso». La actitud del soltero no gustó a la andaluza: «No me ha parecido bien que no me quiera decir la edad».
Lejos de que todo quede ahí, fue mucho más allá: «Quería que la adivinara, pero ¿por qué la tengo que adivinar? Si tú no me la dices, yo tampoco te la digo. De hecho, ni me la ha preguntado. A mí me gusta decir mi edad, estoy contenta». Poco después, quisieron sincerarse sobre sus profesiones. Fue entonces cuando descubrieron que tenían algo en común como es el yoga.
Por si fuera poco, Fermín dejó sin palabras a su cita al hacerle saber su pasión por la música. «Yo estuve a punto de ir al conservatorio, quería tocar el piano o el acordeón», comenzó diciendo Ángela. A pesar de todo, tal y como hizo saber al equipo de First Dates, la soltera no había sentido ningún tipo de atracción física con el soltero: «Me ha gustado más su interior que su exterior».
La cita avanzaba y empezaban a darse cuenta de que coincidían en muchos más aspectos. Uno de los más notables es que los dos estaban de acuerdo a la hora de tener una relación estable. «Me ha gustado porque yo también quiero una relación seria en la que estemos a gusto los dos», aseguró Ángela. Fermín, por su parte, fue más allá: «Coincidimos en muchas cosas». Es más, también confirmaron que eran bastante activas en cuanto a sexo se refiere.
En la recta final de la cita, el programa les invitó a pasar al reservado en busca de intimidad. El jienense quiso dejar sin palabras a Ángela con una canción de lo más romántica. A pesar de que trató por todos los medios de conquistar a la andaluza, ella tenía muy claro que no era lo que buscaba. ¡No hubo opción a tener una segunda cita fuera de las cámaras de First Dates!
Temas:
- First Dates