Sara Carbonero se pone nostálgica al recordar el amuleto del Mundial de Fútbol del 2010
Sara Carbonero recuerda con nostalgia uno de los momentos más especiales de su vida

Sara Carbonero se encuentra en un momento de inflexión en su vida. Quizás por el bache que está atravesando (de manera ejemplar), la periodista últimamente comparte más textos con sus seguidores de esos que invitan a pararse un momento y pensar, también imágenes de cosas sencillas que le hacen feliz y de recuerdos pasados que le transportan a momentos felices que supusieron un antes y un después en su vida
Recuerdos como el Mundial de Sudáfrica del 2010, el evento y el año que cambiaron su vida para siempre. La periodista se hizo un importante hueco en las casas de todos los españoles al ser la encargada de cubrir todos los partidos de fútbol del Mundial, y sin quererlo, se convirtió en una de las protagonistas indirectas del campeonato, donde la Selección Española se proclamó como el mejor equipo del mundo.
Sin duda una de las etapas profesionales y personales más importantes de su vida, que recuerda con un gran cariño y nostalgia. Por ello, Sara compartió con sus seguidores de Instagram un recuerdo muy especial de aquella época. ¿Quién se acuerda de las pulseras que la periodista puso de moda durante el evento deportivo?
Un objeto que se convirtió en un amuleto de la suerte de la selección y que todo el mundo quería lucir en su muñeca en aquella época. De hecho Sara lució unas cuantas de diferentes colores en su muñeca durante todo el Mundial de Sudáfrica.
Pero esa pulsera significa mucho más para ella que un simple recuerdo de la cobertura de los partidos del evento deportivo. Es un recuerdo del 11 de julio de 2010, donde tuvo lugar aquel beso robado de Iker Casillas en pleno directo que paralizó a todo el país que en aquel momento se encontraba pendiente de la rueda de prensa del equipo.
Desde entonces, Sara Carbonero e Iker Casillas han formalizado su relación, han tenido dos hijos y están a punto de cumplir una década juntos. Quién les iba a decir que aquel Mundial de Sudáfrica les llevaría tan lejos.
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