Sarabia, el ‘madridista’ que sí le gusta a Luis Enrique

Es, sin ninguna duda, la gran sorpresa de España en esta Eurocopa 2020. Lo fue su inclusión en la convocatoria, lo fue su titularidad en el decisivo partido frente a Eslovaquia y, sobre todo, su brillante actuación. Si hay alguien que está sabiendo aprovechar su oportunidad, ese es Pablo Sarabia. El jugador del París Saint-Germain está dejando claro que su presencia en este equipo es fruto de la calidad y no de la casualidad. Paso a paso ha ido ganando terreno, hasta convertirse en el principal protagonista de la goleada con la que el equipo nacional cerró la fase de grupos, participando en tres de los tantos que nos permiten soñar, una vez clasificados para octavos de final.

Luis Enrique, que está demostrando no dejar indiferente a nadie, volvía a sorprender con una alineación en la que había cuatro cambios respecto al partido ante Polonia. De ellos, la gran novedad era la inclusión de Sarabia. Relevando a Dani Olmo, pasaba a ser uno de los integrantes del tridente de ataque, junto a Álvaro Morata y a Gerard Moreno.

Como la mayoría de las decisiones que está tomando el técnico en esta Eurocopa, esta también se cuestionó, pero el que fuera jugador del Sevilla no tardó en demostrar que su presencia sobre el césped era todo un acierto. Ya lo venía avisando en los minutos que había tenido en los dos encuentros previos, en los que había dejado un buen sabor de boca. Frente a Eslovaquia, con todo el partido por delante, acreditó el porqué se ha ganado la confianza del asturiano.

Partidazo en ‘su’ Sevilla

No había un escenario mejor para ello. Sevilla, su segunda ciudad, en la que maduró como futbolista durante tres temporadas y en la que se ganó fichar por uno de los mejores equipos de Europa, era la adecuada para demostrar que su presencia en esta Eurocopa no es una casualidad. Eléctrico en ataque, aportó a la Selección toda esa movilidad, verticalidad y profundidad que le había faltado hasta ahora. Y, lo más importante, el gol.

Tras varias intentonas de La Roja –incluyendo un penalti fallado– el marcador no se movía. Hasta que Pablo lanzó desde fuera del área un mísil contra el larguero, que salió rebotado hacia el cielo de La Cartuja y que ya sabemos dónde acabó. Dubravka tuvo la mala fortuna para los suyos de meter el balón dentro de su portería al tratar de echarla a córner. A partir de ahí, se desató España y los goles no pararon de caer.

Tras el gol de Laporte y el paso por vestuarios, volvía a aparecer Sarabia, esta vez para poner su firma en uno de los goles. Aunque su papel no era el de ser el ‘9’ de España, sí que apareció como tal en el corazón del área para mandar a guardar un centro de Jordi Alba desde la izquierda. Nada más comenzar la segunda mitad, dejaba –si es que no lo estaba ya– el partido y la clasificación sellados.

Pero lo de España ante Eslovaquia fue un recital. Y el atacante del PSG se sentía el protagonista. Acudió a recibir un córner sacado en corto, entró al área y metió un pase de la muerte para Ferrán Torres, que remató de espuela e hizo el cuarto. Se desquitaban los de Luis Enrique, a la vez que su ‘madridista’ preferido se convertía en el hombre del partido.

Uno de los ‘madridistas’ de la convocatoria

Una de las principales críticas hacia el seleccionador se basan en la ausencia de jugadores del Real Madrid en esta Selección. Se trata de la primera vez en la historia en la que España acude a una gran cita –Mundial o Eurocopa– sin llevar a algún jugador del conjunto blanco. Sin embargo, dada la gran fábrica de futbolistas que tienen, sí que hay productos de su cantera que han sido llamados por Luis Enrique. Uno de ellos es Sarabia.

Nacido en Boadilla del Monte, se formó en las categorías inferiores de Valdebebas, como lo hicieron los dos Llorente o el propio Morata. Allí coincidió con una de las últimas grandes hornadas que ha tenido el conjunto madridista, como son Nacho, Carvajal, Lucas o el actual delantero de la Juventus. Estaba considerado una de las grandes perlas y, de hecho, fue uno de los primeros en debutar a las órdenes de Mourinho, aunque se marchó para labrarse un futuro en Primera división, haciéndose importante en el Getafe y, más aún, en el Sevilla.

Su gran rendimiento en el Sánchez-Pizjuán le permitió fichar por una de las grandes potencias europeas como es el PSG, donde tiene la difícil tarea de destacar bajo la sombra de Mbappé o Neymar. A lo que se han sumado esta temporada contratiempos en forma de lesión. Pero la prueba de que lo esta haciendo está en el hecho de que es uno de los jugadores a los que Luis Enrique le ha brindado la oportunidad de participar en esta Eurocopa y, sobre todo, de ser importante.

En los primeros partidos de esta fase de grupos, tuvo 25 minutos al final para tratar de solucionar los problemas con el gol y asomarse a la titularidad. Ahora, Sarabia ha tumbado definitivamente las puertas del once y, por la forma en que lo ha hecho, nadie pueda discutir su presencia de inicio ante Croacia. En el momento decisivo, apareció y demostró que puede ser una de las grandes figuras de este equipo, en lo que nos quede de campeonato.