Zarzuela difunde nuevas fotos de Felipe VI para celebrar el décimo aniversario de su proclamación
La Casa del Rey ha distribuido una galería de fotografías inéditas y un vídeo de Felipe VI en su despacho
La Casa del Rey ha distribuido una galería de fotos inéditas y un vídeo del Rey Felipe VI en su despacho del Palacio de la Zarzuela con motivo de la conmemoración del décimo aniversario de su reinado, que se celebra el próximo miércoles 19 de junio.
La serie fotográfica la componen siete imágenes, tres de ellas en blanco y negro. En ellas, se ve al Rey sentado en su escritorio, de pie ante el ventanal que da a los jardines de la Zarzuela o apoyado sobre la mesa de reuniones.
El 19 de junio se cumplen diez años de la ceremonia de proclamación de Felipe VI, en la que el Rey defendió la «ejemplaridad» de la Corona. Un rasgo que ha caracterizado su reinado, en el que ha logrado recuperar la imagen de institución. El monarca se ha fijado además como objetivo dotarla de una mayor transparencia, para lo que ha dado incluso a conocer su patrimonio personal. La defensa de la Constitución y de la unidad de España, en un momento político convulso por el Gobierno de Pedro Sánchez y sus aliados separatistas, han marcado su primera década en el trono.
«Jefe del Estado leal»
En su primer discurso como Rey, Felipe VI defendió que su figura debe ser «símbolo de la unidad y permanencia del Estado», respetando el principio de separación de poderes y manteniendo la neutralidad política. «Encontrarán en mí a un jefe del Estado leal y dispuesto a escuchar, a comprender, a advertir y a aconsejar y también a defender siempre los intereses generales», aseguró entonces.
Señaló, además, que «la Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, saber ganarse continuamente su aprecio, su respeto y su confianza» y también cumplir con su exigencia de «ejemplaridad» a quienes protagonizan la vida pública. «El Rey, a la cabeza del Estado, tiene que ser no solo un referente sino también un servidor de esa justa y legítima exigencia de todos los ciudadanos», defendió.
Uno de sus primeros pasos en la regeneración de la Corona fue reducir los miembros de la Familia Real a él mismo, la Reina Letizia y sus dos hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, así como los eméritos, Don Juan Carlos y Doña Sofía, dejando fuera a sus dos hermanas. Asimismo, poco después de iniciar su reinado, Zarzuela aclaró que las infantas Elena y Cristina no podrían realizar actividades de carácter institucional salvo a petición expresa del Rey y sin percibir ningún tipo de prestación a cambio. Don Felipe también dio instrucciones para que los miembros de la Familia Real no pudieran viajar gratis en vuelos comerciales, aceptar regalos personales «que puedan comprometer la dignidad de sus funciones institucionales» ni beneficiarse de favores o servicios ofrecidos en condiciones ventajosas.
En junio de 2015, procedió a retirar el título de duquesa de Palma a la Infanta Cristina, quien finalmente sería absuelta en febrero de 2017.
Sin duda, uno de los episodios más delicados para Don Felipe ha sido la relación con su padre, Juan Carlos I. En marzo de 2020, se anunció que el Rey renunciaba a cualquier herencia de Don Juan Carlos «que personalmente le pudiera corresponder» y que el emérito, que en mayo de 2019 había anunciado su retirada de la vida pública, dejaría de percibir la asignación fijada en los Presupuestos de la Casa del Rey.
En junio de ese mismo año la Fiscalía abrió diligencias por el supuesto cobro de comisiones por el Rey emérito en relación con la concesión del AVE a La Meca a empresas españolas. El 3 de agosto se anunció el traslado de Don Juan Carlos a Emiratos Árabes Unidos, donde terminaría estableciendo su residencia y donde permanece hasta la fecha.
El antiguo monarca llevó a cabo dos regularizaciones fiscales -una en diciembre de 2020 por 678.000 euros y otra en febrero de 2021 por casi 4,4 millones- y sus investigaciones fueron archivadas. En mayo de 2022, regresó por primera vez a España. Sus visitas han sido más frecuentes en los últimos meses, aunque por el momento no se plantea la posibilidad de su vuelta definitiva.
«Símbolo de la unidad de España»
El otro gran tema que ha marcado esta primera década en el trono de Felipe VI ha sido sin duda Cataluña. En su primer discurso, el monarca ya declaró su fe en la «unidad de España, de la que la Corona es símbolo» y defendió que en la «España unida y diversa, basada en la igualdad de los españoles, en la solidaridad entre sus pueblos y en el respeto de la ley» cabían todos los españoles.
En su discurso del 3 de octubre, el más significativo de su reinado, dejó clara su defensa a ultranza de la Constitución frente a los que ahora socios de Sánchez, quienes, avisó, buscaban «ilegalmente proclamar la independencia de Cataluña», «una deslealtad inadmisible hacia los poderes del Estado».
Don Felipe aseveró entonces que la Generalitat, presidida por Carles Puigdemont, se situaba «de una manera clara y rotunda» al margen del Derecho «y de la democracia».
«Han pretendido quebrar la unidad de España y la soberanía nacional, que es el derecho de todos los españoles a decidir democráticamente su vida en común», avisó. En su discurso, lanzó además un mensaje de tranquilidad a los catalanes no independentistas -«no estáis solos»- como al resto de españoles: «Son momentos difíciles, pero los superaremos. Son momentos muy complejos, pero saldremos adelante (…) porque nuestros principios democráticos son fuertes, son sólidos». Un mensaje que ha guiado hasta ahora su reinado.