Sayas y Adanero defienden su ‘no’ a la reforma laboral: «UPN no podía ser el felpudo de Sánchez»

UPN
García Adanero y Sergio Sayas.

Los diputados de UPN Sergio Sayas y Carlos García Adanero han defendido su voto en conciencia contra la reforma laboral del Gobierno de Pedro Sánchez con la que rompieron la disciplina de voto de su partido y esperan poder continuar en UPN a pesar de que el Consejo Político ya ha ratificado su expulsión, que ahora debe validar el comité de garantías.

Sayas ha defendido que actuó con «dignidad y libertad» y ha asegurado que «lo único que podía justificar» el apoyo de UPN a la reforma laboral era la «ruptura» del PSOE con el nacionalismo, un precio que la formación socialista «no estaba dispuesta a pagar».

Adanero, por su parte, ha afirmado que «es evidente que la dirección está deseando» que se vayan y expulsarles, pero ha asegurado que siguen «confiando en los órganos» y que creen que pueden «defender»su posición. Dice que no ha intervenido en el Consejo porque «cuando hablas con una pared es complicado» pero ha esperado que el Comité de Disciplina le «escuche, pueda dar las razones y a partir de ahí ver lo que pasa».

Sayas dice que ha acudido al Consejo Político a explicar por qué tomaron esa decisión, que fue, ha afirmado: «Por lo que a mi siempre me ha movido en la política que es la dignidad y la libertad, algo en lo que he militado desde que tengo 18 años y en lo que voy a seguir militando toda mi vida».

«Dignidad», ha dicho, «respecto al PSOE; UPN no podía convertirse en el felpudo de Sánchez, un partido pisoteado por alguien que nos estaba diciendo que este pacto era por España y que al día siguiente iba a poner la mano al nacionalismo de nuevo para destrozar España». «Eso no podía ser UPN», ha remarcado.

Por otro lado, ha destacado que «a mi nadie me impuso nada, nadie me compró en ninguno de los momentos. Creo no se me conoce cuando se puede opinar algo así». «Si el precio que estaba dispuesto a pagar el PSN era la no reprobación de Enrique Maya, el precio era insuficiente; si el precio era dinero para el Ayuntamiento de Pamplona entrábamos al foco que criticábamos en los demás», ha recalcado.

Para Sayas, «sólo había un precio posible que el PSOE no estaba dispuesto a pagar, el precio de la ruptura con el nacionalismo, el precio de que el PSOE volviese a ser un partido constitucionalista». «Eso era lo único que podía justificar nuestro voto en un momento en el que Sánchez se estaba jugando la estabilidad de un Gobierno y ese no era el precio que el PSOE estaba dispuesto a pagar», ha reiterado.

Lo último en España

Últimas noticias