Sánchez vuelve al guerracivilismo en campaña: pide homenajes a trans perseguidos por Franco

Pedro Sánchez regresa a la «memoria democrática» en plena campaña para las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo. El programa del Partido Socialista para estos comicios insta a los candidatos a agitar la bandera contra Franco, pero, además, incorpora otros colectivos que han centrado leyes recientes del Gobierno de coalición, como la polémica Ley Trans. Así, entre las medidas incorporadas al documento para los comicios autonómicos, se insta a «impulsar programas y espacios de recuperación de la memoria LGTBI y de la persecución de que fueron objeto las personas trans, homosexuales y bisexuales en el marco de las iniciativas y legislaciones sobre memoria democrática». En este contexto, Sánchez pide medidas «para dar a conocer y proteger el patrimonio LGTBI, tanto material (lugares de memoria) como inmaterial (vivencias, modos de vida y represión de las generaciones LGTBI que nos precedieron)».

Es una de las propuestas recogidas en el documento en el que, bajo el epígrafe Reivindicar la diversidad como activo social, el PSOE ensalza la diversidad «como fuente de innumerables y fundamentales aportes al desarrollo económico, social y cultural de España» frente al discurso de la «derecha y ultraderecha». En este contexto, los socialistas recogen también la prohibición de «cualquier tipo de injerencia y/o veto parental en la gestión curricular autónoma e independiente de la comunidad educativa», el conocido como pin parental.

En el programa, el PSOE se compromete además a impulsar el desarrollo de la llamada Ley de Memoria Democrática, instando a las comunidades autónomas a promover «planes de localización, exhumación e identificación de víctimas de la Guerra Civil y la posterior dictadura franquista que aún yacen en fosas comunes y cunetas». Asimismo, se pide a los candidatos que adopten «medidas de reparación a las víctimas» y apoyen al movimiento memorialista «fomentando su participación». Otra de las promesas es «la eliminación o retirada de vestigios que exaltan el golpe de Estado de 1936 o la dictadura franquista y enaltezcan a sus protagonistas». Los socialistas también pretenden «introducir la memoria democrática en la escuela, actualizando los contenidos curriculares para ESO y Bachillerato, e incluyendo en los planes de formación inicial y permanente del profesorado la actualización científica, didáctica y pedagógica en relación con el tratamiento escolar de la memoria democrática».

Esta serie de medidas van en la línea de lo establecido en la Ley de Memoria Democrática, que entró en vigor el pasado mes de octubre, aunque aún está pendiente de desarrollo en muchos de sus puntos.

Al igual que en los comicios autonómicos, el programa para las elecciones municipales dedica también un apartado a la «memoria», recordando que en los pueblos y ciudades del país aún perduran «algunas cicatrices» del pasado «traumático» de España. El PSOE habla de «municipios con memoria» y considera que es preciso recordar «los desastres de la guerra» para que las violaciones de derechos humanos no vuelvan a repetirse.

Sí es sí

Agitando sus leyes estrella, Sánchez intenta maquillar las dramáticas consecuencias de la conocida como ley del sólo sí es sí, que ha provocado ya 979 reducciones de condena a agresores sexuales, de los cuales, 104 han sido excarcelados.

El PSOE llegará a estos comicios en plena polémica por la ley y tras aprobar en el Congreso -previsiblemente, el próximo 27 de abril- una reforma que, en cualquier caso, no evitará que las revisiones de condena sigan produciéndose.