Sánchez se exhibe en un cine con la imputada Begoña Gómez presumiendo de «dignidad»

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha exhibido este miércoles por la tarde en una sala de cine de Madrid junto a su esposa, Begoña Gómez, imputada por corrupción. El jefe del Ejecutivo se ha ido acompañado por un cámara que se encargara de grabarle en la entrada al cine y en su acceso interior a la sala de proyecciones, con las entradas en la mano. Las imágenes han sido tomadas en los Cines Verdi, de la madrileña calle Bravo Murillo.

Destaca el hecho de que en todo momento se aprecia que el presidente y la imputada Begoña Gómez discurren sin la presencia de ciudadanos, lo que se ha convertido ya en un clásico en numerosas de sus apariciones públicas en las que su equipo de seguridad y de imagen velan por evitar la cercanía de personas de a pie que puedan increparle.

Sánchez, acorralado por los casos de corrupción que afectan a su esposa y a su hermano, David Sánchez Pérez-Castejón, no duda en presumir de «dignidad» en el mensaje en redes sociales con el que ha ilustrado este video, cuidadosamente editado previamente y que ha utilizado como propaganda particular. Al mismo tiempo, se presenta como adalid de la «clase trabajadora».

Mientras las investigaciones judiciales por delitos de corrupción acechan a su esposa y a su hermano, Sánchez se prodiga presumiendo de «dignidad». Así, en el texto con el que acompaña su video entrando al cine con la imputada Begoña Gómez, el presidente reproduce a modo de proclama: «La dignidad no es algo abstracto. La dignidad es la lucha por el agua, la lucha por la luz, la lucha por Correos, la lucha por la sanidad y la educación públicas. Eso es la dignidad».

«Salgo emocionado de ver El 47, un homenaje maravilloso a la España plural y trabajadora que construyeron nuestros padres, madres, abuelos y abuelas», dice Sánchez en este mensaje que ha difundido en redes sociales.

La exhibición de Sánchez con su esposa imputada es reincidente. Es la segunda vez que el presidente se hace grabar entrando a un cine. Y se suma a la retahíla de comparecencias y pronunciamientos de Pedro Sánchez en los que ha defendido a Begoña Gómez y la ha presentado como una víctima de una supuesta campaña contra ella de la oposición y de la Judicatura.

En mayo, el jefe del Ejecutivo llegó a exigir que se le pidiera «perdón» a su esposa por las informaciones que se han ido publicando con evidencias de sus negocios privados, trufados de encuentros en Moncloa y de amistades que comprometen al propio presidente del Gobierno. Frente a los indicios de corrupción que han dado lugar a la instrucción judicial que hay en curso contra su esposa, Sánchez sostiene desde la Presidencia del Gobierno que Begoña Gómez es una profesional «honesta, seria y responsable». La esposa de Sánchez está imputada por la presunta comisión de los delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios.