El PSOE matiza que solo eliminará la asignatura de religión en los colegios públicos

Meritxell-Batet
a responsable de elaboración del programa, Meritxell Batet aclara que proponen eliminar la religión solo en los centros públicos. (Foto: EFE)

La coordinadora del programa electoral del PSOE, Meritxell Batet, ha tenido que explicar esta mañana en un programa de televisión que la medida sobre eliminar la religión en los colegios se refiere a los centros públicos y no privados, tras el revuelo ocasionado.

Este lunes los socialistas hicieron público el borrador del programa para las elecciones generales donde establecen, entre otras medidas, que el Gobierno deberá promover «las reformas del marco legal actual necesarias, así como de los acuerdos internacionales para promover una escuela pública laica donde no quepa la integración, ni en el currículum ni en el horario escolar, de enseñanzas confesionales».

Sin embargo, la medida causó gran revuelo ayer tras explicar que los socialistas buscaban eliminar la asignatura de religión sin especificar más. De esta manera el partido explicó que «sólo podrán estudiar religión en forma de actividad extraescolar, igual que la danza española o las actividades deportivas infantiles», explicaron.  Batet ha tenido que volver a explicar esta mañana en el programa de Espejo Público en Antena 3 que se trata de centros públicos y no privados.

Una medida que ni Felipe González ni José Luis Rodríguez Zapatero se atrevieron a presentar por aquello del rédito electoral. Zapatero, aseguran, que ordenó a su equipo elaborar una ley de «libertad religiosa» pero «se guardó en un cajón y nunca se llegó a presentar».

Ahora Sánchez busca aprobar una ley de Libertad Religiosa y de Conciencia que establecerá un estatuto común para todas las confesiones. Esta norma implica la eliminación de los crucifijos de las tomas de posesión y establecerá un protocolo para hacer actos de Estado de carácter civil y no católicos.

Asimismo, el capítulo de laicidad en el borrador incluye la denuncia del Concordato que tiene España con el Vaticano y que cuenta con rango de acuerdo internacional. La intención del Partido Socialista es romper este acuerdo al máximo nivel. Un compromiso que ya figuraba con el anterior candidato, Alfredo Pérez Rubalcaba, que no pudo llevar a su ejecución tras perder las elecciones.

El objetivo de los socialistas consiste en eliminar privilegios a la Iglesia católica desde la perspectiva económica, aunque se alude también a otras iglesias. «Avanzaremos en la autofinanciación de las confesiones religiosas y estableceremos una fiscalidad general para aquellos bienes de las confesiones religiosas que no están afectos a uso de culto», señala el borrador.

Actualmente la Iglesia no paga impuestos por los templos donde ejerce el culto, ni tampoco por los inmuebles que no están dedicados a ese uso. Según los socialistas consultados, el debate por la exención del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) «lleva toda la vida en el partido, pero siempre se ha quedado como propuesta sin llevarlo a la práctica».

Los socialistas también proponen cambiar la Constitución para eliminar la actual referencia a la Iglesia y añadir «el sometimiento de los representantes de los poderes públicos al principio de neutralidad religiosa».

 

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