PSOE y Podemos ceden un auditorio municipal en Vinaroz para hacer apología de los «países catalanes»
El ayuntamiento de Vinaroz (Castellón), que gobierna un tripartito encabezado por Tots Som Vinaròs (la franquicia local de Podemos), PSPV-PSOE y Compromís, ha organizado para el próximo sábado una jornada por los ‘Países Catalanes’ con el diputado de ERC Joan Tardá como ponente. El acto lleva por nombre «Vinaroz, presente y futuro de la unión entre Cataluña y el País Valenciano», y para su celebración el consistorio ha cedido el Auditorio Municipal.
El diputado en el Congreso por Esquerra Republicana de Cataluña disertará en Castellón sobre la declaración unilateral de independencia de Cataluña y su efecto sobre lo que los separatistas denominan ‘Países Catalanes’. En su imaginario expansionista, el independentismo incluye en ellos a las tres provincias de la Comunidad Valenciana: la propia Castellón, Valencia y Alicante.
ERC siempre ha abogado por ello y su portavoz en el Congreso de los Diputados presidirá una jornada en Castellón y que será presentada por el concejal de Acuerdo Ciudadano (una coalición integrada por Esquerra Republicana del País Valenciá, IU y Los Verdes) Lluís Batalla.
Castellón y los pasos del nacionalismo
El escenario elegido para este acto para divulgar los ‘Países Catalanes’ no es casual. Vinaroz no sólo está gobernado por podemitas (5 concejales) e independentistas (2 de Compromís y 1 de Acuerdo Ciudadano) con apoyo de los 4 ediles socialistas. Ademas, ha sido escenario en los últimos meses de muestras de respaldo a los golpistas de Cataluña. El puente sobre el río Cervol ha aparecido en varias ocasiones cubierto de lazos amarillos.
En ese acto, con entrada libre y en el que Tardá también responderá preguntas de los asistentes, el parlamentario separatista defenderá tanto la unidad política de estas dos comunidades como su independencia en esos imaginados ‘Países Catalanes’. Partidos políticos como la CUP, la citada Esquerra Republicana del País Valenciá (ERPV), y otras entidades pancatalanistas como la Plataforma per la Llengua País Valencià llevan años tratando de imponer el término.
Un objetivo con la excusa de la lengua y que se ha comenzado a implementar con decisiones como la del cambio de nombres a las calles o en los topónimos en la provincia (ya es oficialmente ‘Castelló’ y no ‘Castellón’) pero que, siguiendo la estrategia y métodos implantados en Cataluña, ha dejado paso a su verdadero objetivo: el de la política y con la independencia y secesión del resto de España como estación final.