Presos de ETA manipulan una instrucción de la OMS sobre el Covid en las cárceles para exigir la libertad
Las plataformas de apoyo a los presos de ETA y que hablan en su nombre han exigido al Gobierno de Pedro Sánchez que ponga en libertad a buena parte de sus presos por el peligro que supone el coronavirus en las cárceles. Lo hacen argumentando que así lo recogen los protocolos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que piden flexibilizar las estancias carcelarias. Pero la OMS, en el documento original, habla de «aquellos condenados por delitos menores y no violentos, en particular mujeres y niños». Una calificación que no encaja ni de lejos con los presos etarras.
«Las prisiones españolas permanecen blindadas desde hace casi un mes y todas la comunicaciones y traslados han sido suspendidas. Todo esto supone, tal y como hemos denunciado junto a otras 16 entidades del Estado español, un auténtico ataque a los derechos de los y las presas y su entorno», han denunciado desde Etxerat, la plataforma de los presos de ETA.
«Mejoraría mucho la situación poner en libertad, de inmediato, tal y como recomendaron la ONU, la OMS, el Consejo de Europa, a muchos presos y presas por su derecho a la salud y a la vida», alegan.
Un protocolo manipulado
Efectivamente, la OMS emitió en mayo de 2020 una declaración sobre el Covid en prisiones y centros de detención, en la que daba algunas consignas e instrucciones para mejorar la seguridad sanitaria en las cárceles. Y se hablaba de poner en libertad a presos. Pero no precisamente a los del tipo en el que encajan los etarras.
Así, la agencia de la ONU para cuestiones de salud hablaba de «poner en libertad a reclusos con un riesgo particular de COVID, como personas mayores y personas con afecciones preexistentes, así como a reclusos que no suponen un riesgo para la seguridad pública». Presos «condenados por delitos menores y no violentos», una descripción lejana a los ilícitos penales de los delitos de terrorismo.
Denuncian que no ven a sus familiares
Según aseguran los presos etarras, la transgresión de sus derechos no son nuevas, sino que vienen produciéndose «desde que decretara el estado de alarma hace un año». «Desde entonces se han sucedido cierres perimetrales, suspensión de comunicaciones familiares y visitas en locutorio. Hay menores que no ven desde hace muchos meses a sus familiares directos presos en Francia y España; familiares mayores de edad que ya han desistido de hacerlo».
«Los estados han optado por construir más cárceles dentro de las cárceles, cerrar a cal y canto las prisiones, algo que consideramos desproporcionado, teniendo en cuenta el nivel de contagios dentro. Los presos conforman un grupo de riesgo», advierten.
El 60% han sido acercados
En rondas de unos cinco presos de ETA semanales, el Gobierno de Pedro Sánchez ya ha acercado al País Vasco o Navarra, o a cárceles a menos de 200 kilómetros de sus domicilios, a más de un 60% de los terroristas que aún cumplen condena. De 195 convictos, sólo 75 permanecen a más de 3 horas por carretera de sus familias, cumpliendo así las exigencias que lleva planteando EH Bildu a Pedro Sánchez a cambio de su apoyo parlamentario.
Los acercamientos de Sánchez a presos de ETA, cuyas estadísticas exactas no ofrece el Ministerio del Interior más allá de sus comunicados cada viernes informando de la nueva hornada de traslados, ya superan los 130 en total.