Un ‘pequeño’ detalle: de 30 fiscales, 20 renovaron, 5 fueron cambios menores y sólo hubo 5 nuevos

Manuel Moix, fiscal jefe Anticorrupción y Jesús Alonso, fiscal jefe de la Audiencia Nacional.
Manuel Moix, fiscal jefe Anticorrupción y Jesús Alonso, fiscal jefe de la Audiencia Nacional.
Juanan Jiménez
  • Juanan Jiménez
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El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha sido duramente criticado por el nombramiento de los nuevos fiscales al frente de Anticorrupción, Manuel Moix, y de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso. Sin embargo, se ha pasado por alto un ‘pequeño’ detalle y es que, de los 30 puestos que se debatieron en el pasado Consejo Fiscal, 20 de ellos han sido renovados en sus cargos, todos ellos nombrados en la época de Cándido Conde Pumpido —número uno de la Fiscalía durante el Gobierno de Zapatero—, cinco fueron cambios menores y sólo los cinco restantes son relevos, entre los que están Moix y Alonso, además de los titulares de las fiscalías de Murcia, Andalucía y País Vasco.

Los nombramientos de Moix y Alonso, al frente de las fiscalías más sensibles —las que tratan los temas sobre corrupción y los asuntos relacionados con el terrorismo—, se han visto por parte de la mayoría de grupos políticos como un injerencia del fiscal en el buen funcionamiento del Ministerio Público. Especialmente, en el caso de la Fiscalía Anticorrupción de la que dependen un buen número de casos en los que de una u otra manera está involucrado el Partido Popular —Bárcenas o Gürtel — y tramas como la de la familia Pujol o los ERE de Andalucía.

En este caso, achacan a Maza que Manuel Moix carece de experiencia en temas de corrupción —era fiscal de lo Contencioso-Administrativo en el Tribunal Supremo— pero olvidan que el Consejo se decantó por él por su amplia experiencia al frente de la Fiscalía de Madrid, una de las más complejas de todo el territorio nacional.

En el caso del nuevo fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso, el cambio parecía el natural, el número 2 sustituye al que hasta ese momento era el nº1, Javier Zaragoza. Tampoco ha gustado entre la clase política este ascenso, dado que consideraban a Zaragoza un experto en materia de lucha contra el terrorismo de ETA y el yihadismo y que había desempeñado el cargo satisfactoriamente durante 11 años.

Dejando de lado estos dos nombramientos en las fiscalías más ‘políticas’, en el resto de decisiones adoptadas en el Consejo Fiscal ha primado la continuidad. Algo que Maza había recalcado cuando tomó posesión de su cargo. De ahí que 20 fiscales relacionados con áreas sensibles como la lucha contra el narcotráfico, Extranjería o delitos informáticos, entre otras, hayan sido renovados en sus cargos, pese a que la mayoría son ‘herencia’ de la época de Conde Pumpido.

Relevos en Murcia, Andalucía y País Vasco

El relevo del fiscal jefe de la región de Murcia, Manuel López Bernal, también ha sido ampliamente contestado en todos los partidos que componen el arco parlamentario. López Bernal era el encargado de la acusación del presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, en el llamado ‘caso Auditorio’. En las últimas semanas, C’s y PP han mantenido un tira y afloja en esta causa a propósito de si Sánchez debía dimitir o no tras conocerse que ha sido llamado a declarar en calidad de investigo el próximo 6 de marzo a petición del juez instructor.

No entienden los grupos de la oposición, no sólo C’s, también el PSOE que fue quien denunció el caso, cómo el Gobierno puede relevar al fiscal que ha acusado a Sánchez en esta causa. Pasan por alto que su sustituto, José Luis Manzaneda, es precisamente el representante del Ministerio Fiscal que ha llevado hasta el momento el proceso, con lo que pocos conocen el caso como él y debería defender desde su nuevo puesto el trabajo que ha venido realizando hasta el momento a las órdenes de López Bernal.

Menos polémico, pero no exento de crítica, ha sido el relevo de Jesús María García Calderón, hasta el momento fiscal jefe de Andalucía, por la fiscal Ana Tárrago. El Ministerio Fiscal tiene todavía pendiente la resolución del caso de los ERE en dicha comunidad, con lo que acusan a Maza de haber realizado un relevo que se podía haber pospuesto en el tiempo dada la complejidad de la trama.

El relevo de Juan Ramón Calparsoro al frente de la Fiscalía Superior del País Vasco estaba prácticamente cantado debido a las polémicas declaraciones que realizó Calpasoro en una emisora de radio al decir que era «discutible» la decisión de inhabilitar a Arnaldo Otegi como candidato a lehendakari en las elecciones vascas.

Los últimos cinco cambios en las diferentes oficinas del Ministerio Fiscal hasta completar 30 fueron en su mayoría decisiones menores, relacionadas con traslados de poco relevancia.

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