Los partidos presionan para que el Congreso constituya ya las comisiones para cobrar sobresueldos
Mientras los debates se centran en la investidura del presidente del Gobierno, la actividad parlamentaria comienza a dar algunos pasos.
Es el caso de la constitución de las comisiones, en pleno proceso. Estos órganos, una veintena, son una especie de grupos de trabajo encargados de preparar informes sobre proyectos de ley o temas de diferentes especialidades, como Asuntos Exteriores, Constitucional, de Justicia, Interior, etc. De acuerdo a lo aprobado en la Mesa de la Cámara, cada una se compone de 37 parlamentarios.
Según ha podido saber OKDIARIO, el hecho de que en esta legislatura la constitución de las comisiones vaya más retrasada ha generado indignación entre los diferentes grupos políticos.
Ser miembro de una de estas comisiones es un jugoso reclamo para sus ‘señorías’. De acuerdo al régimen económico del Congreso, los pluses van de los 697,65 euros brutos mensuales que cobran, por ejemplo, los secretarios o portavoces adjuntos, a los 1431,31 que corresponden al presidente de la Comisión. Los vicepresidentes o portavoces, por su parte, se llevan 1.046,48 euros.
Un añadido al sueldo base de 2.831,87 euros mensuales que de por sí cobran todos los diputados (y a los que además hay que sumar 1.823,86 euros para aquellos que procedan de fuera de Madrid, o 870,56 para los electos por la circunscripción madrileña).
De acuerdo al esquema de composición, cada una de estas comisiones está formada por un presidente, dos vicepresidentes y dos secretarios. El resto de miembros se distribuye en portavoces, portavoces adjuntos, vocales y adscritos, cuyo número depende del total de miembros que componen la comisión en cada legislatura.
Medio millón de euros de ahorro al mes
A falta de conocer cuántos diputados se asignarán a estos últimos puestos, cada comisión implica un coste en pluses de, al menos, 27.244,37 euros mensuales brutos. Esto supone que el coste mensual de las comisiones llegue a más de medio millón de euros, en concreto 544.887,4. Esto es, no obstante, considerando que todos los puestos son ocupados por diputados diferentes, algo que no suele ocurrir. En la práctica, cada uno de ellos puede copar más de un cargo y, en ese caso, cobraría el salario más alto correspondiente. Por ejemplo, si uno ocupa una secretaría y una portavocía, recibiría 1.046,48 euros, el plus correspondiente a éste último, el de mayor cuantía.
Hasta el momento solo se han constituido dos comisiones, las del Estatuto del Diputado, encargada de custodiar las declaraciones de bienes y de revisar las actividades extraparlamentarias de los 350 diputados, y la de Peticiones, que canaliza las solicitudes de los ciudadanos sobre los más diversos asuntos. Ambas quedaron formadas este martes, al considerar la presidenta del Congreso que su constitución debía ser prioritaria.
Pero no será hasta la próxima semana cuando el Congreso dé luz verde a 18 comisiones más, las que se conocen como ‘legislativas’.
Más presidencias para el PP
Los grupos parlamentarios han acordado este jueves un acuerdo sobre la composición de las mismas (14 diputados para el PP, 9 para el PSOE, 7 para Podemos, 3 para Ciudadanos, 1 para ERC, otro para PNV y dos para el Mixto) y se están ultimando el reparto de las presidencias de las mismas y sus mesas.
El esquema inicial en cuanto al número de órganos que presidirá cada uno sobre el que trabajan los portavoces es prácticamente idéntico al de la anterior legislatura, aunque el PP podría finalmente lograr la presidencia de más comisiones al tener ahora 15 diputados más.
También se da prácticamente por hecho que los grupos volverán a elegir a las mismas personas para presidir esos órganos.
Fuentes del PP han avanzado su intención de proponer a la exministra Celia Villalobos para presidir la Comisión de Seguimiento del Pacto de Toledo, un cargo que en la anterior legislatura ocupó el diputado de Podemos y juez en excedencia Juan Pedro Yllanes. El PP quiere compensar a Villalobos con este puesto tras haberla sacado en julio de la Mesa del Congreso, donde venía ejerciendo como vicepresidenta y de la que ha formado parte en los últimos doce años.
También puede quedarse sin presidir una comisión el exsecretario de Organización de Podemos Sergio Pascual, que en enero fue elegido al frente de Fomento. Además, el grupo confederal de Unidos Podemos tiene que decidir qué puestos de las Mesas de las comisiones son para Izquierda Unida y las confluencias.
Los ahora socios de Podemos estaban en la anterior legislatura en el Grupo Mixto (Alberto Garzón presidió la Comisión Mixta para el problema de las drogas) y ahora han recalado en este conglomerado de partidos los ocho diputados de la antigua Convergència, uno de los cuales, Jordi Xuclà, fue elegido para presidir la Comisión de Cooperación en enero y no se descarta que repita.
Sin embargo, la otra formación independentista catalana de la Cámara, Esquerra Republicana, volverá a quedarse sin ninguna Presidencia de comisión.