Murcia le exige a Pedro Sánchez una reunión bilateral como la que mantuvo con Torra
El Ejecutivo de Murcia ha exigido este jueves al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, un «trato igualitario» y la celebración de una «mesa bilateral» como la mantenida con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra. El Gobierno de Murcia solicita este encuentro con Sánchez para hablar de temas que «preocupan» a la Región como la «infrafinanciación o el Mar Menor».
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la portavoz del Ejecutivo murciano, Ana Martínez Vidal, ha manifestado su «preocupación» por las imágenes que abrieron este miércoles los informativos de todo el país, y que mostraban a Torra recibido «con honores de Estado» por Pedro Sánchez, en una mesa «bilateral» que tendrá carácter mensual.
En este sentido, el Gobierno regional pide «respeto institucional» y un trato «igualitario» con el resto de comunidades autónomas. «Si Cataluña cuenta con el Gobierno central para resolver lo que califican como un problema político, el Ejecutivo murciano solicita también una mesa de diálogo bilateral para hablar de temas como la infrafinanciación y el Mar Menor», según Martínez Vidal. Se trata, añade, de temas «que ocupan y preocupan al Gobierno regional», ha concluido.
Sánchez y Torra: cómplices
Pedro Sánchez recibió al presidente catalán inhabilitado, Quim Torra, antes de la reunión de la «mesa» de negociación entre las delegaciones del Gobierno y la Generalitat. La complicidad fue el gesto más destacable. Sánchez acudió a recibir personalmente a Torra y ambos pasearon tranquilamente hasta la entrada de La Moncloa, donde tuvo lugar el encuentro. Unos minutos antes, el socialista había hecho lo mismo con los miembros de la delegación catalana, al igual que los ministros que también forman parte de la mesa.
Pedro Sánchez y Quim Torra afrontaron la primera reunión de la mesa de negociación desde «posiciones antagónicas» y mientras el Gobierno español mantiene que lo importante es «sentarse» a hablar, la Generalitat insiste en llevar a la mesa el derecho de autodeterminación, la amnistía y el «fin de la represión».