Marlaska acerca al País Vasco a uno de los etarras que negoció la tregua-trampa con Zapatero
Nuevo acercamiento de presos de ETA al País Vasco por parte del Gobierno de Pedro Sánchez en pleno proceso de los socialistas por conquistar a EH Bildu. En esta ocasión, el beneficiado es un un etarra con pedigrí: la Secretaría de Estado de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska, ha trasladado al etarra Unai Fano Aldasoro de la cárcel de Soria a la de Basauri (Vizcaya). Fano fue uno de los comisarios de Batasuna que sirvieron de enlace con ETA durante la negociación de la banda terrorista con el Gobierno socialista de Zapatero que llevó a la tregua-trampa de 2006. Una tregua que los etarras rompieron volando por los aires el parking de la T-4 del aeropuerto de Barajas (Madrid) en diciembre de ese mismo año.
El colectivo de presos etarras Etxerat se congratulaba este mismo lunes de la noticia del acercamiento, otro más, de un preso de la banda terrorista a una cárcel en el País Vasco. Según informaba la organización, el «preso político» Unai Fano ya había ingresado este fin de semana en su nueva celda de Basauri. Es natural de Bilbao pero su familia reside en Hernani (Guipúzcoa), a apenas una hora de distancia de prisión.
En apenas año y medio, Fano ha sido trasladado desde la cárcel de Algeciras (a 1.100 kilómetros de distancia de Hernani) a Soria (a sólo 260 kilómetros). Y de ahí, un año más tarde, a Basauri. Del punto más alejado de la península a estar en ‘casa’ en cuestión de meses.
Un preso de ETA singular
Fano no es un preso más de ETA. Considerado una persona muy cercana al actual líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, Fano fue una pieza fundamental en el engranaje que desarrolló la banda terrorista para llevar al Gobierno a firmar un «alto el fuego permanente» en el año 2006. Según se sabe ahora, era Fano quien trasladaba la voluntad de ETA a aquellas reuniones con el PSE y el PNV, el enlace entre Batasuna y la banda, y quien susurraba a Otegi el sentir de la cúpula terrorista ante las propuestas de socialistas y nacionalistas vascos.
Ese «alto el fuego» de la banda, que fue una maniobra de distracción para ganar tiempo y oxígeno ante la presión policial que sufría todo el aparato operativo terrorista en ese momento, voló por los aires a la vez que lo hacía el módulo D del parking de la T-4 del aeropuerto de Barajas. ETA detonó una furgoneta cargada con 500 kilos de explosivo y mató a dos ciudadanos de origen ecuatoriano. La tregua quedaba rota y Fano, a quien se considera uno de los responsables de esta ruptura, huiría a Francia en 2008 y sería detenido unos meses después.
Zapatero y los indultos
El Gobierno de Pedro Sánchez va camino de pasar a la historia como el que más presos etarras ha acercado e, incluso, puesto en libertad. Ya son más de 80 en apenas dos años en Moncloa. Pero ya estaba en los planes del PSOE hace 14 años, cuando el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se sentó a la mesa de negociaciones con la banda asesina.
Así lo ha confesado este lunes en una entrevista en Radio Euskadi el propio ex presidente. El hombre que consideró al terrorista Arnaldo Otegi «un hombre de paz», ha reconocido que «en ese proceso había sobre la mesa todas las opciones posibles», pero no se llegó a avanzar «en ninguna medida penitenciaria de gracia porque el proceso se cortó como consecuencia del gravísimo atentado de la T4».
Zapatero ha negado que se haya vuelto a ver con Otegi desde el famoso encuentro que tuvo con él en septiembre de 2008, pero no descarta volverlo a hacer «en algún momento». En todo caso, se ha preguntado si es pronto para hacerlo porque, quizá, acontecimientos como el fin de la violencia «necesite que se madure, que se sosiegue y racionalice».
Sin embargo, el ex presidente socialista celebra todos los pasos que Pedro Sánchez está dando para blanquear a EH Bildu, los legatarios políticos de ETA, porque, a su juicio, «a la democracia le acompaña siempre el valor de la generosidad».
Por ello ha pedido a aquellos compañeros del PSOE a los que incomoda que el Gobierno tenga a EH Bildu como interlocutor y socio que se debe aplicar «el principio de la coherencia». «Quien representa a los ciudadanos en el Parlamento, tiene los derechos de dialogar y poder llegar a acuerdos», ha afirmado.
Detención de 3 etarras
Pese a todo, la lucha contra ETA no ha cesado en los cuarteles de la Guardia Civil y las comisarías de Policía Nacional. Agentes de la Guardia Civil detuvieron este mismo lunes a los tres responsables de un zulo de explosivos de la banda terrorista ETA que fue localizado en junio de 2019 en el municipio de Arraya-Maestu, en el concejo de Atauri (Álava).
Los detenidos formaron parte en su día del denominado ‘comando Ezpala’ de ETA, que estuvo activo entre los años 2008 y 2010, y se integraba dentro del ‘complejo Donosti’ de la banda terrorista. Se trata de Imanol Jaio, Kepa Arkauz y Ekinhe Eizaguirre.
La detención en febrero de 2010 del responsable del citado complejo, Ibai Beobide, propició la huída de sus integrantes, dos de los cuales –Arakauz y Eizaguirre– fueron detenidos en Francia posteriormente y condenados por asociación de malhechores.