Madrid pedirá a Sánchez un toque de queda de 00:00 a 6:00 horas que deberá garantizar Marlaska
El objetivo es evitar fiestas privadas y botellones y a vez, no dañar la actividad económica
La decisión está tomada. Sí habrá solicitud de toque de queda por parte de la Comunidad de Madrid. Se solicitará oficialmente en la reunión de las comunidades autónomas con el Gobierno. Se pedirá para asegurar el control entre las 00:00 y las 6:00 horas de cada día. La fórmula legal para asegurar el control en esa franja temporal se dejará a disposición del Gobierno central, que será quien tenga que decidir si opta por un estado de alarma, por la aplicación de la ley de salud pública o por la herramienta jurídica que considere oportuna.
La exigencia del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso será muy sencilla de explicar: Madrid carece de policía autonómica y sigue necesitando de los mismos agentes -para garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias y de control del Covid- que ya le reclamó la presidenta regional a Pedro Sánchez en la reunión en Sol y que nunca han terminado de llegar.
Por eso, y puesto que el foco de descontrol de la enfermedad es la franja personal entre los 15 y 29 años de edad, muy identificada con reuniones de amigos y fiestas, la Comunidad de Madrid solicita un toque de queda en las franjas que menos dañan la actividad económica y que coinciden con las de las fiestas y botellones.
Por eso, para asegurar el control de las medidas en esas franjas horarias, se solicita un toque de queda que deberá materializar la policía del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. A partir de ahí será el Gobierno de Sánchez el que explique el medio jurídico que emplea para garantizar ese control, en caso de aceptar la petición de la Comunidad de Madrid.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso aceptará un estado de alarma limitado a esas franjas horarias y con ese fin en su territorio. Y rechazará cualquier intento de aplicarlo fuera, por varios motivos. El primero, que la curva de la enfermedad sigue bajando y en el resto de colectivos el control está siendo posible. El segundo, que extralimitar el confinamiento parcial que habilita el estado de alarma se convertiría en un dardo a la actividad económica imposible de superar en la situación actual.
Con la medida madrileña se pretende salvaguardar buena parte de la actividad hostelera. De hecho, los restaurantes pasarían a disfrutar de una hora más de actividad siempre que garanticen el control de las medidas anti-Covid en sus locales.
Hay que recordar que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado este martes que el Gobierno va a debatir con las comunidades autónomas esta posibilidad de establecer toques de queda para reducir la movilidad en la lucha contra el coronavirus. Todo ello, después de que la Comunidad de Madrid haya pedido estudiar la medida.
De este modo, el jefe del Ejecutivo ha enfriado la posibilidad de poner en marcha por ahora esta posibilidad a nivel nacional que, según ha explicado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, requeriría necesariamente la declaración del estado de alarma.
En rueda de prensa en Roma junto al primer ministro italiano, Giussepe Conte, Sánchez ha señalado que primero hay que ver en qué se sustancia esa propuesta de Madrid y, después, debatirla con el resto de Comunidades en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS).
Por su parte, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha advertido que, antes de pronunciarse sobre si ve oportuno un toque de queda para todo el país, es preciso clarificar cuál sería el alcance de esta medida, es decir, si afectaría sólo al cierre en la franja nocturna de actividades económicas o si también se limitaría el derecho de los ciudadanos a salir en la calle. «Si sabemos a qué se refiere, quizás en algunos lugares, en función de la incidencia, sea una buena práctica», ha dicho.
Madrid y el resto de comunidades
Aunque lo cierto es que Madrid lo pide para Madrid. El resto es ya cuestión de Sánchez y las demás comunidades autónomas. El Gobierno central ha insistido en que la opción del toque de queda afectaría a todo el territorio nacional, algo que no reclamará Madrid.
Es más, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha subrayado que, para decretar esta limitación de movilidad o actividad necesita una herramienta como el estado de alarma o el de sitio. Cuestión que, de nuevo, no exige Madrid.
Ambas alternativas no convencen a Moncloa, que prefiere renunciar al paraguas jurídico del estado de alarma ahora que ya no es la Comunidad de Madrid la principal potencial afectada, sino que tendrían que entrar autonomías de corte nacionalista o socialista. El ministro Illa ha aclarado que la implementación del toque de queda «es una decisión que no está tomada».