Los barones se imponen a Sánchez: sólo se pactará con Podemos si renuncia a la autodeterminación
Los barones se imponen a Pedro Sánchez. Tras una larga reunión a puerta cerrada en Ferraz que comenzó a las 18.30 horas de la tarde y se prolongó hasta las 23.05 horas, este lunes el Comité Federal firmará una resolución única para que Sánchez intente formar Gobierno. El secretario general y su ejecutiva han cedido y sólo se sentarán a hablar con Podemos si la formación morada renuncia al referéndum en Cataluña.
Los presidentes territoriales pusieron encima de la mesa un documento en el que Sánchez se compromete a «no negociar con fuerzas que quieran romper España», tal y como anunció Okdiario en exclusiva. Lo que excluía a Podemos y a las fuerzas independentistas con las que Sánchez conseguiría llegar a La Moncloa. Ahora, para que los socialistas se sienten a la mesa, Pablo Iglesias deberá decir alto y claro que ‘aparca’ su propuesta de las negociaciones para formar Gobierno. Tras casi cinco horas de reunión, ambos bandos han logrado establecer una postura común para que la firma de este lunes sea un mero trámite.
El documento establece que, en primer lugar, los socialistas dejarán al presidente en funciones Mariano Rajoy intentar formar Gobierno y en caso de que no lo consiga, entonces Sánchez podrá pactar para ser presidente. En lo que sí ha habido acuerdo unánime es en que se vote «no» a la investidura de Rajoy. Lo que no han especificado es si podría darse una abstención en la segunda vuelta, tal y como algunos socialistas habían planteado. Esto cambiaría mucho el escenario para el secretario general, que quedaría relegado a la oposición con su figura desdibujándose dentro del partido de cara al Congreso para su reelección.
Si la ‘guerra interna’ del PSOE fuera un partido de fútbol, la reunión de este domingo se resumiría en ‘barones 1 – 0 Sánchez’. El peso de Emiliano García-Page (28% de los votos), Guillermo Fernández Vara (36%) y Susana Díaz (31%), que juntos suman la mayoría de los votos socialistas en sus respectivas comunidades, ha sido decisivo para esta negociación a puerta cerrada. «Es nuestra línea roja», ha dicho a su salida el presidente de Asturias, Javier Fernández.
Otro punto que ha quedado claro tras la reunión es que se va a hacer autocrítica. No se puede decir que los resultados en las elecciones han sido buenos cuando no lo han sido. «No se puede mentir a los ciudadanos cuando los resultados son evidentes», aseguran a Okdiario.
A partir de ahora, la tarea de Sánchez consiste en convencer a Pablo Iglesias de que abandone su propuesta, que de momento y, según fuentes internas de Podemos, no parece estar muy por la labor. Esta última semana, el partido de Iglesias ha establecido una serie de líneas rojas por las que no estaría dispuesto a pasar en caso de posibles pactos para formar Gobierno y son: la Ley de Emergencia Social, que presentarán el primer día que se formen las Cortes; la eliminación de las puertas giratorias; los recortes presupuestarios y la auditoría de la deuda bancaria.
Sin embargo, a Sánchez le quedaría conocer qué es lo que piden a cambio los independentistas. Algo todavía más difícil si nos fijamos en cómo ha terminado la asamblea de la CUP donde se decidía si daban la presidencia a Artur Mas. Empate con ‘líos internos’ y la decisión aplazada hasta el próximo 2 de enero.