Los independentistas lanzan una ‘caza de brujas’ contra jueces que usan perfiles anónimos en redes
En vísperas de que se inicie el juicio contra el referéndum ilegal del 1 de octubre, el independentismo ha lanzado una nueva ofensiva contra los jueces.
En este caso, contra los magistrados, fiscales y otros miembros de la judicatura que utilizan perfiles anónimos para poder verter sus opiniones en las redes sociales.
La voz de alarma la ha lanzado, este jueves, ‘Lady Crocs’. En un ‘hilo’ de mensajes en Twitter relata el acoso que lleva sufriendo desde hace semanas, e iniciado por el diputado de ERC, Gabriel Rufián.
«Hoy me he despertado triste. Me apena la deriva que está llevando la actual situación. Soy juez, formo parte de un Poder del Estado, el Poder Judicial. La Constitución Española garantiza a los ciudadanos que debo ser independiente, imparcial, inamovible y sometida únicamente al imperio de la ley», explica.
A continuación, cuenta: «El mes pasado, un diputado de las Cortes Generales, un miembro del Poder Legislativo, me señaló. Obvió mi deseo de permanecer en el anonimato e indicó dónde ejerzo». En el mensaje revela un ‘tuit’ del diputado Rufián, en el que revela que ejerce en Huesca.
El relato continúa. «Un mes después -narra Lady Crocs- un medio de comunicación financiado por la Generalitat de Cataluña y la de Valencia, correspondientes al Poder Ejecutivo, reveló mi identidad, expresó cuál es mi juzgado y publicó una imagen mía sin mi consentimiento».
El último ‘episodio’ se vivió este miércoles. El senador de Bildu Jon iñárritu registró una iniciativa en la Cámara en la que solicita la comparecencia del presidente del Consejo General del Poder Judicial para «informar sobre las medidas tomadas contra los magistrados/as que desde el anonimato en las redes sociales mantienen comportamientos irregulares e incompatibles con su cargo».
La iniciativa de Bildu provocó un rifirrafe con el senador, que defendió que se enmarcaba en la «transparencia».
Amenazas
Por último, ‘Lady Crocs’ denuncia que «durante dos semanas han estado publicando la identidad de perfiles de jueces y fiscales que escribimos bajo seudónimo, cada uno por sus motivos. A raíz de eso a algunos les están llegando amenazas a su domicilio o lugar de trabajo».
La ‘caza de brujas’ ha recibido multitud de críticas en las redes sociales, donde se recuerda el derecho al anonimato y las consecuencias penales de revelar datos personales.
No se veía algo parecido desde los tiempos de la Comisión McCarthy. Se pide la convocatoria del Fiscal General del Estado y del presidente del CGPJ para que informen sobre cuentas en Twitter de jueces y fiscales. Feliz caza de brujas, senador. https://t.co/6PBuIODciU
— Almeida (@bufetalmeida) January 31, 2019
Además de castigarse la ‘reversión de la anonimización mediante el uso indebido de datos personales, el Código Penal sanciona con penas de prisión de tres meses a dos años o multa de seis a veinticuatro meses «el que mediante el uso indebido de sus datos personales, haga que terceras personas se pongan en contacto con ella».