La Iglesia no facilitará la exhumación de Franco sin el consentimiento de la familia

A las trabas jurídicas con las que se está encontrando Pedro Sánchez para exhumar los restos de Francisco Franco se va a unir otra importante con la que, probablemente, no había contado. Y es que la Iglesia no facilitará el traslado de los restos del dictador sin el consentimiento de la familia. Las afirmaciones sobre la supuesta postura de la Iglesia han sido múltiples en los medios de comunicación, otorgándole un papel protagonista para incrementar la presión sobre ella y lograr que facilitara el traslado de los restos mortales del dictador.

Pero la decisión viene desde el Vaticano y no piensan caer en esa trampa: la postura definitiva la tiene que marcar la familia y sin su consentimiento o con él, el papel de la Iglesia se limitará a cumplir la ley.

El Gobierno había pretendido que la Iglesia llevase a cabo una labor de mediación con la familia. Ha pretendido poner a esta institución en medio del problema para generar una imagen de que si no se prestaba era porque estaba defendiendo poco menos que una postura franquista.

Pero el intento no ha surtido efecto y la postura eclesiástica es ya firme. De este modo, el Gobierno deberá negociar con la familia si quiere llegar a algún punto de entendimiento. Algo que en estos momentos es prácticamente imposible. En caso contrario, se tendrá que arriesgar a una defensa jurídica de la familia y la Fundación Francisco Franco, que ya han dejado claro que no otorgarán el consentimiento ni se harán cargo de los restos del dictador en caso de que definitivamente sean sacados del Valle de los Caídos.

De este modo, el protocolo está ya establecido y es claro. El primer paso por parte de la familia fue firmar una escritura notarial en la que los siete nietos del dictador plasmaron su rechazo a la exhumación y su negativa a hacerse cargo de los restos de su abuelo en caso de ser sacados del Valle de los Caídos.

La escritura posteriormente fue entregada al Abad del Valle y al resto de personas que podrían tener que encontrarse con la delegación enviada al Valle de los Caídos en el momento de proceder al traslado de los restos mortales de Franco.

De ese modo, cualquiera que pretenda acceder a la tumba tendrá comunicación inmediata de que lo hace contra el criterio de la familia y, por lo tanto, ateniéndose a las consecuencias jurídicas del acto.

El apoyo jurídico cuenta con rango de ley orgánica y está desarrollado en el artículo 26.4 del Reglamento de Sanidad Mortuoria de la Comunidad de Madrid (aprobado mediante el Decreto 124/1997, de 9 de octubre), donde se establece que “la autorización de las exhumaciones se solicitarán por algún familiar o allegado del difunto, acompañando la partida de defunción literal de los cadáveres cuya exhumación se pretenda”.

Por eso la Iglesia no va a facilitar el traslado de los restos de Franco sin apoyo legal. Porque la iniciativa es del Gobierno y, o cuenta éste con un respaldo legal real, o todos los que accedan a la cripta e intervengan en la actuación sabrán que existe una posibilidad de estar participando -con conocimiento- en un acto que puede acabar en los tribunales.

Esa es la estrategia jurídica diseñada por la familia. Y la Iglesia no va a ir ni a favor de los deseos del Gobierno, ni se va a involucrar en la actuación jurídica de los nietos.