Hasta 9 miembros de la Confederación del Júcar tenían información de la riada pero no llamaron al 112
Estos altos cargos y técnicos de la CHJ recibieron un correo sobre el elevado caudal pero no llamaron a Emergencias
El organismo público presidido por Miguel Polo depende del Ministerio que dirige la vicepresidenta Teresa Ribera
Hasta 9 miembros de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que dirige Teresa Ribera, tuvieron información de la riada provocada por la DANA del pasado 29 de octubre en Valencia, pero no llamaron al Centro de Emergencias 112 de la Generalitat. Así lo indican fuentes conocedoras de las comunicaciones electrónicas que se produjeron en aquella trágica jornada.
En concreto, en el correo electrónico de las 17:56 horas que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) remitió al 112 aparece un listado de destinatarios, entre los que se encuentran no sólo el presidente de dicho organismo, Miguel Polo Cebellán, ex concejal del PSOE en Titaguas, como ha publicado OKDIARIO, sino también otros ocho altos cargos y técnicos de la CHJ. En concreto, se trata de Enrique Vicente Campos Roselló, jefe de Explotación; Gregorio de Julián Pérez, técnico del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH); Ricardo Domínguez Lillo, jefe de servicio Policía de Aguas; Francisco Javier Ferrer Polo, director técnico responsable del Sistema SAIH; Diego Irles Rocamora, jefe del servicio de Obras; Cristina Sola García, comisaria de Aguas; Manuel Torán Busutil, director técnico; e Ignacio Valero Garcés, jefe de área del SAIH.
Ninguno de estos integrantes de la CHJ se puso en contacto telefónico con Emergencias 112 de la Generalitat para alertar de la peligrosa situación en que se encontraba el barranco del Poyo. En el correo electrónico de las 17:56 horas, la CHJ señaló que el embalse de Forata había empezado a verter y que se preveían caudales superiores a los 1.000 metros cúbicos por segundos.
Apenas unos minutos después, en torno a las 18:00 horas, el caudal en el barranco del Poyo se disparó hasta los 1.725,89 metros cúbicos por segundo. Pese a ello, la CHJ no remitió comunicación alguna sobre esto a Emergencias, pese a que el protocolo del organismo de cuenca obliga a comunicar a Protección Civil cualquier crecida superior a los 150 m3 por segundo.
No fue ya hasta las 18:46 horas, otra vez por correo electrónico y sin ninguna llamada telefónica, cuando la CHJ mandó a Emergencias el controvertido mail anunciando un caudal de 1.686 metros cúbicos por segundo con tendencia ascendente y una crecida muy rápida en el barranco del Poyo. A esa hora la riada ya estaba devastando poblaciones como Paiporta. Y es que dicho caudal era equivalente a 4 veces el del río Ebro y 35 veces el del Trasvase Tajo-Segura.
Nada del barranco desde las 16:13
Se dio, además, la circunstancia de que la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no comunicó nada sobre la evolución concreta del caudal del barranco del Poyo desde las 16:13 horas. Es decir, la CHJ se pasó dos horas y media sin decir absolutamente nada a Emergencias de la Generalitat de la situación del citado barranco. Y ello, pese a que hasta 9 altos cargos y técnicos de la CHJ tuvieron conocimiento de la peligrosidad a través del citado correo de las 17:56 horas.
A las 17:00 horas el caudal era ya de 325,52 metros cúbicos por segundo y a las 18:00 horas el caudal se había disparado hasta los 1725,89 m3 por segundo. En ningún caso la CHJ remitió comunicación alguna sobre estas circunstancias a Emergencias, es decir, no notificó nada al 112 de la Generalitat pese a que el caudal estaba superando y con creces los 150 m3 por segundo desde las 17:00 horas. El protocolo dice que la CHJ está obligada a comunicar de forma inmediata a Emergencias cualquier subida del caudal por encima de los 150 m3 por segundo.
«Nadie lo podía prever»
Por su parte, el jefe de la Unidad Militar de Emergencias (UME), el teniente general Javier Marcos, ha declarado este viernes que «nadie podía prever» la magnitud de la DANA a su paso por la Comunidad Valenciana, y que pese a ello se intervino «lo antes posible» con la información de la que se disponía en ese momento.
En una rueda de prensa en el Ministerio de Defensa tras la reunión que ha celebrado esta mañana el comité de crisis y que ha encabezado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Marcos ha esgrimido que no se pudo dimensionar la respuesta a la emergencia de la DANA porque esa «cantidad» de agua «nadie podía» anticiparla. Este temporal no sólo afectó a la Comunidad Valenciana, sino también a Castilla-La Mancha, dejando al menos 222 muertos.
«Es que la velocidad del agua, desde el inicio de las cuencas, junto con el lodo, eso no lo podía prever nadie. Toda la información que se proporcionó era buena. Y la contrastamos mientras ya estábamos actuando, para llegar lo antes posible. Intervinimos lo antes posible», ha señalado el jefe de la UME, añadiendo que la información que llegó «no falló» porque se trasladó «en tiempo oportuno todo lo que se pudo», según recogió Ep.