La Guardia Civil multa por desobediencia a un hombre que gritaba «¡Viva el Rey!» ante el casoplón de Iglesias
Continúan las movilizaciones ciudadanas en Galapagar, que el vicepresidente Pablo Iglesias califica como «acoso fascista» contra su familia, tras haber promovido y apoyado cuando estaba en la oposición escraches mucho más salvajes y brutales contra sus adversarios políticos.
La Guardia Civil ha denunciado por desobediencia a un sujeto que gritaba una y otra vez «¡Viva España! ¡Viva el Rey!» en las inmediaciones de la mansión del vicepresidente Pablo Iglesias y la ministra Irene Montero en La Navata (Galapagar).
Como muestra el vídeo que acompaña a esta noticia, los hechos ocurrieron después de que un agente de la Guardia Civil identificara al manifestante y a la mujer que le acompañaba, por proferir gritos en la zona de monte que rodea el casoplón de Iglesias y Montero.
El agente informó a los dos manifestantes de que iban a ser multados, pues la ordenanza municipal de Galapagar no permite «alterar la tranquilidad de los vecinos», según explicó. El manifestante se reiteró entonces en su actitud: «Yo sí he gritado y voy a gritar otra vez, como ya me han multado voy a aprovechar».
El agente le comunicó que en ese caso también tendrá que denunciarle por desobediencia a la autoridad, por hacer caso omiso a sus advertencias. Pese a ello, el manifestante comenzó a proferir gritos de «¡Viva España! ¡Viva el Rey!», que fueron coreados por otros asistentes a la protesta ciudadana.
Hace apenas una semana, Pablo Iglesias e Irene Montero suspendieron las vacaciones que habían comenzado a disfrutar en Asturias, en la casa de un familiar del secretario general del PCE, Enrique Santiago, con la excusa de que había aparecido en la carretera una pintada con el lema «Coletas rata» a varios kilómetros de la vivienda.