La Guardia Civil busca cuentas de ANC y Òmnium en Suiza y otros paraísos fiscales

Los Jordis
Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, máximos dirigentes de la ANC y Òmnium, respectivamente. (Foto: EFE)
Carlos Cuesta

La Guardia Civil ha llegado a la conclusión de que la labor de ANC y Òmnium Cultural es plena y absolutamente central en el golpe de Estado separatista. Tiene constancia del fuerte volumen de subvenciones destinado a este tipo de entidades, especialmente a Òmnium, que se acerca ya a los 20 millones de euros.

Pero no cree que esta fuente de ingresos pueda ser el único flujo monetario con el que han contado -y podrían seguir contando- para inyectar el separatismo y desestabilizar la sociedad. La Guardia Civil cree que sus rutas de dinero pueden estar implantadas en esquemas internacionales y ha decidido empezar a buscar posibles conexiones con otros entramados financieros en el extranjero e, incluso, en paraísos fiscales, ante la evidencia de pasadas utilizaciones de estos mecanismos por parte de los Pujol y de otros cargos vinculados a la Generalitat.

La búsqueda no ha hecho más que empezar, pero la Guardia Civil quiere comprobar la veracidad de algunas informaciones facilitadas por las propias organizaciones. Y es que, la ANC, por ejemplo, hoy en manos de Jordi Sánchez y liderada hasta 2015 por Carme Forcadell, no hace públicas sus cuentas y los únicos datos que se conocen son los publicados en prensa.

Y, según las informaciones filtradas hasta ahora, habrían contado con unos ingresos de entre 3,3 millones y 1,9 millones en los últimos años, unos recursos que resulta complicado que puedan soportar la enorme actividad que desarrolla esta asociación.

Las cuentas de ANC para 2017, de hecho, llaman aún más la atención porque de ese reducido presupuesto oficial se destina más de medio millón a gastos de personal lo que aún debería haber reducido más su capacidad operativa.

La Guardia Civil quiere comprobar por todo ello si hay ingresos procedentes del exterior. Y para ello la Benemérita ha pedido la colaboración de la Asociación Española de Banca (AEB), la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito para que faciliten toda la información posible.

Entre esos datos podría accederse al estado actual de las cuentas, depósitos o fondos de inversión, y, sobre todo, a los movimientos de los que se han nutrido. En esos datos, además, deberían quedar retratados los titulares y apoderados de las cuentas que pueden ser responsables del origen y destino de los fondos.

Los informes de la Guardia Civil apuntan a una coordinación tan esencial por parte de estas asociaciones que incluso habrían llegado a estar presentes en las reuniones del Gobierno autonómico catalán mientras se adoptaban algunas de las principales decisiones separatistas.

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