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El Gobierno destina la cuota de 180 autónomos a pagar los 52.000 € de la niñera-alto cargo de Montero

fiscal caso niñera
Teresa Arévalo e Irene Montero.
Pelayo Barro

María Teresa Arévalo Caraballo, la jefa de gabinete adjunta del Ministerio de Igualdad que compagina su cargo con las labores de niñera para Irene Montero, percibe al año un salario como funcionaria de máximo nivel -el 30- que roza los 52.000 euros. El importe equivalente de la cuota mínima  que aportan a la Agencia Tributaria mensualmente 180 trabajadores autónomos españoles, un colectivo especialmente golpeado por la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus.

Para pagarle el sueldo íntegro (51.946 euros) a la niñera-alto cargo de Irene Montero hace falta que el Estado destine esos 289 euros mensuales de 180 autónomos que coticen por la base mínima de su régimen. Una cuota que se elevó en 2020, en pleno desmoronamiento de la economía.

Son tiempos difíciles para los autónomos. Según los datos de la última encuesta de población activa, correspondiente al cuarto trimestre del año 2020, el número de  autónomos ha descendido en casi 20.000 personas respecto al mismo trimestre de 2019. El retroceso económico experimentado por la pandemia y las restricciones aplicadas a la movilidad y a ciertos sectores, especialmente la hostelería, el comercio y los espectáculos. Las medidas puestas en marcha han asestado un duro golpe a estos colectivos de autónomos. Sin embargo, ni se han suspendido las cotizaciones ni se han aprobado ayudas ni tampoco se ha planificado un plan para desahogar a los autónomos de sus cargas fiscales. Para ellos es como si el Covid no existiese en términos de sus obligaciones con Hacienda.

Sus promesas a los autónomos

El domingo, OKDIARIO se hacía eco de un vídeo que han recuperado las redes sociales, grabado en noviembre de 2019, en el que la ahora asesora de alto nivel Teresa Arévalo le ofrece a Montero una bebida mientras la ahora ministra está cuidando de su hija menor. «Un té roiboos, y si no, un zumo de naranja», le dice a su entonces  asistente. Curiosamente, ese vídeo se grabó en las mismas fechas en las que Montero publicaba en sus redes sociales otro vídeo (en el que va igual vestida) de un encuentro en ese mismo despacho con representantes del colectivo de autónomos.

En aquellos días, en plena campaña electoral y a pocos días de las elecciones en las que Podemos retrocedería en votos pero conseguiría llegar al poder, Montero aseguraba que la cita con esos dos autónomos le permitía «conocer su día a día y los problemas que enfrentan».

El autónomo que acudió a la cita en Congreso se quejaba que «la cuota de autónomos es algo complicado. En Portugal no pagan, pagan si facturan. En Francia no pagan, o pagan con respecto a la facturación… aquí, si yo no vendo un libro pago 350 euros». Montero escuchaba atentamente y negaba con la cabeza. «Es surrealista», decía antes de prometer «cuotas justas para los autónomos, que cada persona pague por lo que ingrese». Las condiciones para el sector siguen siendo las mismas que entonces.

Víctima de la «precariedad»

Arévalo, por su parte, se define a si mismo como una víctima de la precariedad laboral y asegura que su activismo político que «siempre ha tenido como objetivo luchar por una sociedad más justa y con oportunidades para todos». Declaraciones suyas incluídas en la biografía que puede consultarse aún en la web de Podemos.

La jefa de gabinete adjunta de Montero, señalada ante el juez por dedicarse a la crianza de la pequeña de los Iglesias-Montero, no dispone de más formación que el Bachillerato no tiene experiencia alguna en ningún ámbito laboral privado. La hoy alto cargo del Ministerio de Igualdad cuenta que «la situación precaria que nos afecta a tantos en este país», le obligó a regresar a su pueblo manchego después de haber intentado realizar estudios universitarios en la Facultad de Ciencias Políticas. La misma facultad de la Universidad Complutense en la que daban clase Juan Carlos Monedero y Pablo Iglesias, y que Podemos convirtió en el germen de lo que luego acabaría siendo la formación morada.

«No es hasta mi llegada a la Facultad de Ciencias Políticas de la Complutense cuando comienzo a implicarme activamente en la militancia política y en los movimientos sociales», asegura Arévalo en su perfil.

Constancia documental

OKDIARIO publicó el pasado jueves en exclusiva la prueba definitiva que demuestra que la formación de Iglesias y Montero pagó con dinero electoral viajes a Teresa Arévalo y a la hija menor de la pareja (Aitana) durante la campaña de las últimas generales.

Fueron viajes a ciudades y pueblos en los que la pareja que dirige Podemos presidieron actos electorales, que les impedían hacerse cargo del bebé de pocos meses. En aquel momento, Arévalo dirigía la secretaría de Políticas de Cuidados de Podemos.

La presencia de Árevalo acompañando a Irene Montero ha quedado acreditada ante el juez al presentarse la factura de uno de estos viajes (con fecha del 20 de octubre de 2019 a Alicante). Un documento que ha desvelado Mónica Carmona, ex jefa de Cumplimiento Normativo de Podemos, al juez que investiga a Podemos por financiación irregular y por supuesta simulación de contrato con la consultora Neurona.

Carmona explicó por escrito al juez que «recibí una denuncia interna confidencial afirmando que la dirigente de Podemos Irene Montero Gil utilizaba a una persona a sueldo del partido, la señora Teresa Arévalo, como cuidadora de sus hijos, lo cual, además de ser contrario a las más elementales normas éticas, podría ser constitutivo de un acto de administración desleal del patrimonio del partido».

Podemos tilda de «absolutamente falso» el relato de la abogada purgada por investigar la cuentas del partido. Monedero, en declaraciones a la agencia EFE, niega que exista un caso con la niñera de Irene Montero y acusa «la máquina del fango» de situar rumores en las portadas de los periódicos y los informativos de televisión.

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