La Generalitat paga más de 100.000 euros anuales para mantener la oficina del ex president Montilla
Los ex presidentes de la Generalitat cuentan con una serie de privilegios, una vez dejan la presidencia, con los que no cuentan otros presidentes autonómicos. Uno de esos privilegios, más allá del de mantener un sueldo vitalicio, es el de disponer de una oficina desde donde dirigir la acción como expresident. Actualmente los cinco ex presidentes del Govern están vivos, aunque solo tres de ellos disponen de oficina del ex presidente, la más cara, la del socialista José Montilla, con un coste solo en alquiler de más de 100.000 euros anuales.
Montilla, que también es senador por designación autonómica a propuesta del PSC, eligió una despacho de más de 310 metros cuadrados en la confluencia de la Avenida Diagonal con la Rambla Cataluña de Barcelona, que tiene un precio de 96.281,83 euros a los que cabe sumar un total de 6.607,33 euros en gastos comunitarios, lo que suma un total de 102.889,16 euros. En la oficina trabajan normalmente un responsable de la oficina, en el caso de de Montilla Jordi Menéndez Pablo -con un sueldo de 98.354 euros anuales, además de una secretaria y un responsable técnico de comunicación, personal eventual del departamento de la presidencia, con un sueldo de 38.000 euros. En la oficina, cuando está el ex President -Montilla se pasa la mitad de la semana en Madrid, en el Senado-, también están los responsables de seguridad, funcionarios de los Mossos d’Esquadra.
El otro expresident socialista, Pasqual Maragall, retirado de la vida pública desde que se le diagnosticó Alzheimer en 2007, es más humilde. Cuenta con una oficina de poco más de 80 metros cuadrados en la calle Brusi de Barcelona, con un coste de 13.411,94 euros de alquiler anual, más 12.366,2 de la seguridad y 2.249,99 del alquiler de una plaza de parking, un total de 28.173,13 euros. Maragall, según datos del Govern, no cuenta con personal a cargo de la Generalitat.
Artur Mas, por su parte, eligió un espacio público, el Palau Robert -los bajos de la sede de la consejería de Empresa-, en la confluencia de la Diagonal con Paseo de Gracia -muy cerca de la oficina de Montilla y del propio domicilio de Mas, desde donde va andando cada día, para instalar su oficina de ex presidente. Aún así, a su servicio cuenta con un equipo de seguridad que cuesta 18.624,80 euros. Mas también tiene a su disposición una responsable de la oficina, su ex secretaria personal en Palau Reis Quinzaños con un sueldo de 98.354 euros, así como secretaria y jefa de prensa.
Jordi Pujol y Carles Puigdemont, en cambio, no cargan nada al erario público para desarrollar su actividad como ex presidentes. Pujol renunció a las ventajas del cargo, cuando confesó tener dinero oculto fuera de España mientras que Puigdemont no aceptó el sueldo de ex President ni la puesta a su disposición de la oficina, cuando la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, se lo ofreció tras su cese con la aplicación del artículo 155.
Chófer y escoltas
Los ex presidentes de la Generalitat también tienen a su disposición un vehículo oficial que se les cambia cada cinco o seis años, y que es propiedad del parque móvil de la Generalitat. En el vehículo, conducido por un agente de escolta de los Mossos, viajan el expresident -en muchas ocasiones acompañado de su esposa- y otro escolta que le acompaña cada vez que sube y baja del vehículo. Excepto Puigdemont, aquí sí que todos los ex presidentes disponen de vehículo para su actividad: Mas se desplaza en un Volskwagen Passat matriculado en 2017, Montilla en un Ford Mondeo matriculado en 2012, y Maragall y Pujol en un Seat Altea XL matriculados en 2012.