Feijóo exige a Sánchez el cese de Albares y el embajador por la «coacción» a Edmundo en la sede española
Emplaza al jefe del Gobierno a decir que "España no es equidistante entre la democracia y la dictadura"
"La diplomacia no puede estar al servicio de un régimen dictatorial", afirma el líder del PP desde Roma
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha exigido este jueves al jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, el cese del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y el del embajador en Caracas, Ramón Santos, por la «coacción» presencial a Edmundo González, presidente electo de Venezuela, que se produjo en la residencia española por parte de dirigentes del régimen chavista de Nicolás Maduro, incluida su vicepresidencia Delcy Rodríguez.
Así lo ha demandado Feijóo, con tono contundente, en una comparecencia en en la Asociación de Prensa Extranjera en Roma, junto al ministro de Exteriores italiano, Antonio Tajani, tras reunirse con la primera ministra de este país, Giorgia Meloni. Preguntado sobre esta cuestión y las palabras del vicesecretario de Acción Institucional del PP, Esteban González Pons, acusando al Gobierno de Pedro Sánchez de ser «cómplice» del «golpe de Estado» en Venezuela, Feijóo ha subrayado que el Ejecutivo socialista «ha mentido» (dijo que no hubo negociación) y que «la diplomacia no puede estar al servicio de un régimen dictatorial». «Se ha llegado muy lejos», ha enfatizado.
Tras señalar que las «graves revelaciones del presidente electo (Edmundo González) no pueden ser ajenas a ningún demócrata», ha emplazado a Pedro Sánchez a pronunciarse sobre estas «prácticas mafiosas con escenario en la embajada española en Caracas»
«En una embajada no se puede coaccionar a nadie, menos a un representante del pueblo venezolano por quienes son protagonistas de un demoledor informe de Naciones Unidas de violación masiva de derechos humanos después de las elecciones y antes de las elecciones», ha afirmado Feijóo en relación a Delcy y su hermano, Jorge Rodríguez, actual responsable de la Asamblea Nacional de Venezuela y presente también en la delegación española.
En este contexto, Feijóo ha deslizado que esta coacción se hizo «con el conocimiento del presidente del Gobierno (de España) y del titular de Exteriores», el socialista José Manuel Albares. El líder popular ha querido así plantear varias «preguntas retóricas» a Tajani, sentado a su lado y jefe de la diplomacia italiana: «¿Se imagina que dos altos cargos de una dictadura entraran en una embajada italiana para coaccionar al presidente electo de un país? ¿Le cabe en la cabeza que esta coacción se hiciera con el conocimiento del presidente del Gobierno y el ministro de Exteriores?», ha preguntado Feijóo.
Por ello, el jefe de la oposición en España ha recalcado que el embajador debe ser «remplazado», que el ministro de Exteriores ha de «dimitir» y que el presidente Sánchez está obligado a «dar explicaciones y decir que España no es equidistante entre la democracia y la dictadura, ni equidistante ni colaboradora», ha sentenciado.
«Si Sánchez elige la dictadura y no la democracia, me va a tener enfrente siempre», ha asegurado Feijóo, calificando de «inadimisible» que el Ministerio de Exteriores español «esté relacionado con una coacción al pueblo venezolano».
«Hemos hecho el ridículo»
«Hemos hecho el ridículo», ha dicho también Feijóo sobre la política internacional de los socialistas después de que este mismo jueves los de Pedro Sánchez votaran en contra en el Parlamento europeo de una resolución que reconoce a Edmundo González como presidente electo de Venezuela.
Esta resolución, que el PSOE no ha apoyado (el Partido Socialista de Portugal sí lo ha hecho) pide también a la Corte Penal Internacional que incluya las violaciones de los derechos humanos y las detenciones arbitrarias en curso en sus investigaciones sobre los presuntos crímenes contra la humanidad cometidos por el régimen de Nicolás Maduro y que exija que rindan cuentas los responsables.
El candidato opositor venezolano en las elecciones del pasado 28 de julio, Edmundo González Urrutia, aseguró este miércoles que antes de salir de su país se reunió con representantes del Gobierno de Nicolás Maduro en la residencia del embajador español de Caracas y le «coaccionaron» para que firmara un documento reconociendo la victoria electoral de Maduro.
González llegó a España el pasado 8 de septiembre -a bordo de un Falcon del Ejército español que se desplazó hasta Caracas a recogerle- para pedir asilo político tras denunciar fraude en las elecciones venezolanas.
Desde Bruselas, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha equiparado las «acusaciones falsas de desestabilización» que se han hecho contra el Gobierno tanto desde el PP como desde el Ejecutivo de Nicolás Maduro, que ha arremetido contra el gabinete de Sánchez por «mentir siempre», confirmando que hubo un «pacto de caballeros» para sacar a Edmundo de suelo venezolano.
«Veo que hay dos acusaciones falsas de desestabilización de distintos signos políticas por parte de España», ha esgrimido el ministro, al tiempo que ha pedido al PP que «por favor respeten la decisión que tomó Edmundo González y que comprendan las circunstancias tan difíciles en las que tuvo que tomarlas». Albares también ha pedido a Feijóo que desautorice a González Pons.