Un diputado de Podemos dice que no se puede acosar a ningún ciudadano «de izquierda»

Un diputado de Podemos en el Congreso afirma que no se debe acosar «a ningún militante o ciudadano de izquierda». Se trata de Antón Gómez-Reino, diputado podemita por La Coruña que fue candidato de la formación de Pablo Iglesias en las pasadas elecciones autonómicas gallegas del 12J, en las que Unidas Podemos sacó cero escaños.

«No se puede normalizar ni un minuto más la persecución, el acoso y el hostigamiento a Pablo Iglesias, a Irene Montero ni a ningún militante o ciudadano de izquierda. Es lo que pretenden algunos poderes y lo que ejecuta la extrema derecha. Que quede claro, ¡Es acoso fascista!», señala Gómez-Reino en un mensaje colgado en su perfil de Twitter.

No se puede normalizar ni un minuto más la persecución, el acoso y el hostigamiento a @PabloIglesias a @IreneMontero ni a ningún militante o ciudadano de izquierda. Es lo que pretenden algunos poderes y lo que ejecuta la extrema derecha. Que quede claro, #EsAcosoFascista!

— Antón Gómez-Reino🔻 (@AntonGomezReino) August 18, 2020

El parlamentario podemita colgó este tuit para condenar el acoso fake que Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, e Irene Montero, ministra de Igualdad, supuestamente sufrieron durante sus vacaciones veraniegas en Asturias. De este escrache sólo hay una prueba, y es una pintada con el lema «coletas rata» en una carretera, pero para Antón Gómez-Reino esto es «acoso fascista». Para él, sólo habría que acosar y realizar escraches a los políticos, militantes o ciudadanos de derechas, como insinúa en su mensaje publicado en Twitter.

Antón Gómez-Reino fue el candidato de Podemos en las pasadas elecciones gallegas del 12J. En estos comicios la formación de Iglesias volvió a darse un batacazo al no lograr ningún diputado en el Parlamento gallego (en los anteriores comicios gallegos había obtenido 14 escaños). Ese mismo día también se celebraron las elecciones autonómicas en el País Vasco, donde Podemos se llevó otro batacazo: pasó de tener 11 diputados en 2016 a tan sólo 6.

Pablo Iglesias e Irene Montero interrumpieron sus vacaciones en Asturias asegurando que sufren un «acoso fascista». La única prueba de este escrache es la pintada de «coletas rata» en una de las carreteras que dan acceso a la localidad asturiana de Lena, donde los máximos dirigentes de Podemos pasaron las vacaciones en una finca propiedad de la familia del secretario general del PCE, Enrique Santiago.

Ni la Policía, ni la Guardia Civil ni la Fiscalía tienen constancia alguna de este supuesto acoso. Iglesias y Montero interrumpieron sus vacaciones a pesar de contar con un equipo de 15 escoltas pendientes de su seguridad.

«Hay que naturalizar el insulto»

El propio vicepresidente segundo del Gobierno defendió que había que «naturalizar la crítica y el insulto» hacia «cualquier persona pública», como es su caso y el de Montero. Fue el pasado 7 de julio, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de aquel día. «Hay que naturalizar que en una democracia avanzada cualquier persona pública o con responsabilidades en la empresa privada esté sometido a la crítica o al insulto en las redes sociales», aseguró el líder podemita.

«Creo que es normal en una sociedad democrática que se produzcan críticas y que, incluso, todos los que tenemos una presencia pública y una relevancia a la hora de de participar en los debates, y ahí los profesionales de los medios de comunicación, algunos, lógicamente la tienen, pues creo que la crítica es una cosa normal y propia de las democracias. E incluso las cosas desagradables que vemos en las redes sociales y que no nos gustan a nadie también son normales y yo no sería partidario de que eso se pudiera perseguir», añadió Iglesias.