Los consejos de autoayuda del Gobierno para la crisis del Covid: «Si te sientes culpable, no te juzgues»
‘Superando el impacto de la pandemia’. Así se titula la nueva guía del Ministerio de Sanidad, editada en plena crisis de rebrotes. El departamento de Salvador Illa se dedica ahora a dar consejos de autoayuda para afrontar las repercusiones psicológicas del coronavirus. Secuelas que Sanidad llama «dificultades» en un escenario de contagios disparados y dramáticas perspectivas económicas.
«La pandemia ha irrumpido en todo el mundo, provocando cambios en nuestra vida, en nuestro trabajo, en nuestras relaciones y en nuestros hábitos», empieza diciendo el Ministerio. Pese a las preocupantes cifras de nuevas infecciones o el lastre económico de la pandemia, el Gobierno ve en todo ello un mensaje optimista: «Ésta nueva situación puede hacer que algunas personas sintamos algunas dificultades para afrontar el proceso, pero a la vez es una oportunidad de crecimiento y desarrollo personal».
Varios son los escenarios que se plantean. Por ejemplo, si su problema es que se siente «desganado», Sanidad le cuenta lo siguiente: «Es normal, con lo que ha pasado, sentirnos tristes y sin ganas de hacer nada. Si esperamos a tener ganas, es probable que cada vez nos cueste más. Permítete momentos de tristeza y a la vez entrena una nueva forma de actuar. Por ejemplo, en lugar de ‘ya se que me vendría bien salir pero no lo hago porque no tengo ganas’ piensa ‘lo hago aunque no tenga ganas’».
A quienes tienen miedo o temor a salir, a relacionarse y a retomar sus actividades, les avisa de que «queriendo evitar pasarlo mal nos protegemos con medidas que nos pueden aliviar a corto plazo pero a la larga nos traerán mayor malestar». «Orienta tus esfuerzos hacia la vida que llevarías si no te dejases arrastrar por las emociones», recomienda Sanidad.
A los familiares de fallecidos
También encuentra ‘consuelo’ para los familiares de los más de 40.000 fallecidos, de los cuales apenas reconoce 28.000. «Aunque en este momento predomine el dolor por la ausencia de esa/s persona/s, con el tiempo seremos capaces de disfrutar con su recuerdo».
«Date permiso para llorar y estar a solas si lo necesitas. Habla con quienes tengas cerca de la persona fallecida. Exponte poco a poco a situaciones que te evoquen recuerdos, por ejemplo, entrar en su habitación», dice la guía.
Si el problema es que nos sentimos «enfadados» y «con rabia» ante lo sucedido, Sanidad nos recomienda «reconocer el dolor». «Hay cosas que no podemos controlar, luchar contra eso puede ser agotador y no nos deja avanzar», concluye.
Si nos sentimos «culpables» por lo sucedido, no deberíamos «juzgarnos severamente por lo que ‘deberíamos’ haber hecho», opina el Ministerio. «No nos sirve para mejorar, produce el efecto contrario». Así que: «Sé amable contigo, piensa que lo que hiciste fue la mejor opción para ti en ese momento y tu intención no fue dañar. Comparte tus sentimientos con personas de tu confianza».
Hay más consejos. Por ejemplo, «podemos interpretar que los demás no nos entienden o no nos apoyan lo suficiente, nos aislamos y nos sentimos más solos/as aún. A las personas cercanas les duele vernos así, pero muchas veces no saben cómo acertar. Exprésales como te sientes, qué necesitas y cómo te podrían ayudar».
O «puede que no queramos generar más sufrimiento a nuestro alrededor o que nos vean vulnerables, pero esto puede ocasionar incomprensión y soledad». Así que lo mejor, dice el departamento de Salvador Illa, es «buscar momentos para dialogar».
«Da espacios para que expresen sus sentimientos y qué necesitan, así entre todos construirán un entorno gratificante y que amortigüe el dolor mutuamente», concluye.
No es la primera vez que Sanidad emite una guía similar. En otro dossier, que fue revelado por OKDIARIO, ‘Afrontar el duelo en tiempos de coronavirus’, el Ministerio ofrecía directamente sus consejos a los familiares de los fallecidos.
Entre ellos, por ejemplo, «montar una reunión virtual» con la familia «para recordarle, para hablar de él/ella y para preparar el funeral que nos hubiera gustado tener» o «hacer un rito de despedida desde el corazón».
«Ayuda pensar que él/ella ya se ha liberado de esa situación, ya no la siente ni la padece», decía en concreto sobre los difuntos.