Caza de brujas en la policía de Alcorcón para descubrir quién pasó a Vox las balas mostradas en un pleno
La Policía Municipal cree que el Ayuntamiento intenta silenciar así sus reivindicaciones sobre la falta de material
Los policías de Alcorcón están sufriendo una auténtica «caza de brujas» por parte del Gobierno socialista de Candelaria Testa. El comisario jefe de la Policía Municipal, Eduardo de María García, ha abierto un expediente informativo para tratar de averiguar quién proporcionó los cartuchos de bala que la concejal de Vox, Noemí Selas, mostró durante un pleno celebrado en el mes de julio.
Selas fue abroncada por acceder al salón del pleno con balas inertes para mostrar el mal estado de las mismas y pedir la renovación, en su calidad de concejal, del material esencial que usa la policía municipal de la localidad. Las balas, que no tenían ni pólvora, fueron exhibidas por la concejal de Vox para denunciar el abandono que sufre el cuerpo por parte del Gobierno local.
Los sindicatos policiales llevan meses pidiendo la renovación de material esencial como es la munición (que lleva sin reponerse desde hace más de 6 años), nuevos chalecos antibalas o que se les den pistolas Táser. «La ausencia de todo ello representa un grave problema de seguridad no sólo para los agentes sino también para los ciudadanos», han asegurado.
En el escrito que la jefatura ha enviado a la plantilla de Policía, les hacen firmar una declaración responsable y jurada a todos los integrantes del cuerpo en la que debían declarar que no sabían nada de los hechos ocurridos durante el pleno, y en caso de saberlo, lo deberían comunicar inmediatamente.
«Todos los empleados/as públicos/as de esta Administración colaboren con la máxima prontitud y fidelidad en lo que les sea solicitado por la instructora, quien deberá informar sobre el cumplimiento de este deber por parte de todos/as a los que solicite cualquier actuación o manifestación», reza el escrito que advierte expresamente de las consecuencias disciplinarias de no atender a lo instado en términos de desobediencia.
Los sindicatos de la Policía Municipal lamentan que en lugar de tratar de solucionar sus problemas, como es la falta de material, estén tratando de silenciar a la gente y ocultar sus reivindicaciones mediante «el miedo y la coacción velada».
Desde que algunos sindicatos han comenzado a denunciar la falta de material y el abandono por parte de la corporación municipal socialista, desde la concejalía de seguridad se ha optado por vetar a los que alzan la voz en vez de tratar de llegar a acuerdos y consensos para mejorar las condiciones de la policía municipal de Alcorcón.
Cada vez son menos en plantilla porque los agentes deciden irse a otros municipios para mejorar sus condiciones laborales. De las últimas 26 plazas ofertadas por el Ayuntamiento socialista, a día de hoy sólo quedan 13 efectivos y en breve otro miembro de nuevo ingreso abandonará también Alcorcón para prestar servicio en otro Ayuntamiento. Así lo han asegurado fuentes de la policía municipal.
A esto hay que sumar que, en el día a día de la labor policial, los agentes reconocen que no tienen coches suficientes, los terminales informáticos que utilizan están rotos y las impresoras con las que sacan las denuncias tampoco funcionan. «El problema es que el Ayuntamiento decide invertir el dinero en otras cuestiones», han denunciado en declaraciones a este diario.
Por su parte, en portavoz de Vox en Alcorcón, Pedro Moreno, ha reprochado al Gobierno de Alcorcón que actúe como «una mafia» cuando alguien destapa sus ilegalidades. «Parece ser que la negligencia que destapamos desde VOX Alcorcón con el mal estado de los cartuchos de la Policía Municipal ha hecho daño al Gobierno de socialistas y de extrema izquierda que se dedican ahora a presionar y a amenazar a los policías», ha sentenciado.