Informes de Bildu apuntan que Sánchez es clave para crear «la república independiente» vasco-navarra

El partido proetarra EH Bildu, convertido por Pedro Sánchez en socio estratégico para mantenerse en La Moncloa, considera que el Gobierno socialcomunista PSOE-Sumar es clave para avanzar en la construcción de «una república vasca independiente» que incluya Navarra. El pacto de investidura de Sánchez tras las elecciones generales de junio, que el PSOE ha pagado entregando la Alcaldía de Pamplona a los proetarras, es un paso más en la particular hoja de ruta del partido de Arnaldo Otegi y Mertxe Aizpurua.

Ese guión de los abertzales está recogido en documentos internos de Bildu elaborados en mayo de 2021 y en junio de 2023. Y los hechos que se han ido produciendo en los últimos meses reflejan que la alianza sellada por Sánchez con los proetarras responde al mejor de los escenarios que EH Bildu barajaba antes de las elecciones generales del pasado julio. El PSOE ha facilitado justo el marco preferido por los de Otegi.

Así, en el documento titulado Análisis de coyuntura y escenarios en el Estado español, EH Bildu indicaba en vísperas del 23J que «la continuidad del Gobierno de coalición [de Pedro Sánchez] con apoyos desde el independentismo vasco y catalán» era el horizonte preferido ante la cita con las urnas. Y el PSOE cumplió con esa preferencia de los proetarras mediante sus pactos con el secesionismo catalán y con Bildu.

En ese mismo documento interno, los de Otegi indicaban que a partir de ahí, lo que más les ayudaría en sus aspiraciones independentistas era que siguiera el Gobierno de coalición de Sánchez para dar oxígeno a las aspiraciones de los nacionalistas que reniegan de la unidad de España. Los pactos sellados por el PSOE encajan en esas preferencias de Bildu, que describe el actual marco de alianzas políticas con el sanchismo como una etapa intermedia en su camino hacia «la construcción de una república vasca independiente», en la que se incluya la anexión de Navarra al País Vasco mediante una «confederación».

«Realidad plurinacional»

Ese oxígeno que Bildu encuentra en el PSOE para alimentar al independentismo radical vasco es descrito por los de Otegi en ese documento interno, en el que abunda la típica retórica abertzale que también cultivó ETA: «Democratización del modelo territorial asumiendo la realidad plurinacional y abordando una asimetría que encauce democráticamente las demandas territoriales» [sic].

Y, ¿cuál es el objetivo de EH Bildu, a cuyo servicio se ponen los pactos que mantiene con el PSOE? La formación proetarra lo dejó claro en otro documento interno de mayo de 2021, titulado Ponencia política. En él se detalla que el objetivo de toda la estrategia de alianzas que han desplegado con el PSOE responde al objetivo de «la creación de una república vasca independiente, en concreto, la confederación de estados independientes vasco-navarros». Para ello, en este momento el Gobierno de Sánchez es la mejor de sus opciones, porque en esos mismos documentos internos de Bildu se destaca que un Ejecutivo de centroderecha no daría alas a sus pretensiones.

«Inteligencia táctica»

EH Bildu no oculta en sus informes que su mejor opción en todos estos años pasa por que Pedro Sánchez siga instalado en La Moncloa, pero en manos de los votos del independentismo vasco y catalán. Es la fórmula idónea para «recorrer el camino del autonomismo a la soberanía» a través de «una estrategia de largo alcance, con paciencia estratégica y continuidad», indica la Ponencia política de EH Bildu. Y, mientras tanto, «acumular poder».

«Tenemos claro el rumbo y tenemos una estrategia autocentrada, encaminada a crear las condiciones para la ruptura democrática avanzando en la construcción de soberanía», remarca ese mismo documento. Y, como mensaje hacia los suyos, el partido proetarra incide en que «la historia cercana nos enseña que los acuerdos de hoy pueden ser la llave para la confrontación democrática de mañana». Su receta: «Objetivos claros, estrategia sólida e inteligencia táctica para poder actuar en el embarrado campo de juego».