Abertzales reciben a Rivera con insultos y una gran cacerolada en Rentería

Abertzales han recibido este domingo a Albert Rivera en Rentería con insultos y una gran cacerolada. Decenas de personas se concentraron antes de que comenzara el acto de Ciudadanos en esta localidad vasca y comenzaron a proferir gritos amenazantes.

«Fascistas kanpora (fuera), cobardes, asquerosos, hijos de puta» son algunos de los gritos que se han escuchado contra los asistentes al mitin.

Desde los balcones, donde varios edificios exhiben lazos amarillos de gran tamaño, advierten a los medios de comunicación que «sin el permiso del pueblo no se puede grabar» o piden que «se vayan a Valladolid», en medio de silbidos y caceroladas.

Cuatro autobuses con militantes, simpatizantes e informadores han sido escoltados por la Ertzaintza desde un punto de la carretera que une San Sebastián con este municipio gobernado por EH Bildu y después, a pie, hasta la plaza donde se celebra el mitin.

Un fuerte dispositivo policial impidió que los manifestantes se acercaran al espacio reservado para el acto de Cs, que ha sido convocado bajo el lema de «En marcha por la libertad».

Acompañando a Rivera están la eurodiputada de UPYD y víctima del terrorismo, Maite Pagazaurtundua, fichada por Cs como independiente para su lista a la Eurocámara, el filósofo Fernando Savater, y Joan Mesquida, ex director general de la Policía y Guardia Civil con el PSOE y ahora cabeza de lista de Cs por Baleares al Congreso.

Un recibimiento similar tuvo Rivera en noviembre pasado cuando Ciudadanos promovió un acto en Alsasua (Navarra) en apoyo a la Guardia Civil y defender la españolidad de la comunidad foral.

No sufra, sr Rodríguez: Nosotros no pegamos tiros ni ejercemos la violencia como sus compañeros etarras.

Por cierto, pierda toda esperanza: jamás les pediremos permiso para ejercer nuestras libertades en cualquier pueblo de este gran país que es España 🇪🇸. https://t.co/VDj4YmYIZb

— Albert Rivera (@Albert_Rivera) April 14, 2019

Precisamente, este fin de semana otros dirigentes políticos eligieron también el País Vasco para sus mítines, como Santiago Abascal  o Pablo Casado, que el viernes se desplazó a Vitoria.

Los asistentes a los dos mítines de VOX fueron acosados y agredidos por un grupo de simpatizantes de la izquierda ‘abertzale’, que les esperaban en San Sebastián y Bilbao para protestar por la presencia del partido.

Los radicales burlaron el operativo policial de la Ertzainza y se enfrentaron a los presentes en el acto, a los que propinaron patadas y puñetazos. Asimismo, a algunos les retiraron las banderas de España y de VOX que llevaban.