Sánchez vende su idílica recuperación económica con la gasolina, la luz y la deuda disparadas
El presidente Pedro Sánchez, que este miércoles protagonizó una conferencia en Casa de América para presentar sus planes y prioridades en los próximos meses, esgrimió algunos datos y medidas económicas tergiversando cifras, u ocultando circunstancias, para argumentar que España “está mejor que hace un año”, cuando no es así.
En su intervención ante lo que el PP ha calificado como «la sociedad del Ibex» ya que intentó vender sus éxitos como presidente ante representantes de la sociedad civil, empresarios y directivos de las principales compañías del país y cotizadas del Ibex-35, Sánchez aseguró que el Ejecutivo ha actuado con éxito en asuntos macroeconómicos y ante la desatada subida del precio de la luz.
Esta presentación de intenciones, y supuestos logros, se produce en un escenario en el que el precio de la luz, los carburantes y algunos alimentos está disparado.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) de agosto muestra un incremento de un 3,3% en la inflación en España respecto al mismo periodo del año anterior, y supone una aceleración de cuatro décimas frente a julio.
Además, el litro de gasolina se ha encarecido casi un 18%, mientras que el del gasóleo remonta más de un 16%. Es decir, llenar un depósito medio de gasolina de 55 litros cuesta ahora 77,82 euros, unos 13,7 euros más que hace un año, mientras que en el caso de repostar con gasóleo asciende a 69,3 euros, unos 11 euros más.
En esta tormenta perfecta, el precio de la luz se ha disparado un 188%, en el último año, y el precio medio diario de la electricidad en el mercado mayorista ha pasado de valer 46,01 euros el megavatio hora (euros/MWh), el pasado 1 de septiembre de 2020, a los 132,47 euros/MWh que marca la luz este miércoles.
La factura de la luz de un usuario medio en agosto será la más cara de la historia. Sin embargo, Sánchez recordó, a medias, las medidas que ha adoptado, sin éxito, el Gobierno.
Recalcó que desde hace tres años el Gobierno ha tenido un compromiso inequívoco de protección social hacia los consumidores más vulnerables, con ampliación del bono social y aprobación de un bono social térmico, para alcanzar a 1,1 millones de beneficiarios, así como este año ha rebajado el IVA del 21 al 10% y ha suspendido el impuesto del 7% sobre el valor de la producción de energía eléctrica.
IVA e impuesto de generación eléctrica
Cuando destacó que ha bajado el IVA, no explicó que reducirlo al 10% sólo está vigente hasta finales de este año y, cuando sacó pecho por la suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica, tampoco señaló que es sólo durante tres meses.
Suspender este impuesto de generación eléctrica fue una decisión que ya se tomó a finales de 2018, que costó a las arcas públicas 762 millones de euros y que no consiguió abaratar la electricidad, por lo que tuvo que quitar esta medida seis meses después de instaurarla.
Además, hay que tener en cuenta que la rebaja del IVA de la luz del 21% al 10% hasta finales de este año depende de la potencia contratada por cada usuario, y, por ejemplo, en el caso de bares y restaurantes esta se encuentra por encima de la media.
Así, la rebaja del IVA hasta fin de año es sólo para los consumidores con potencia contratada hasta 10 kW, y siempre que el precio medio mensual del mercado mayorista de la electricidad esté por encima de los 45 euros por MWh, circunstancias ‘olvidadas’ hoy por Sánchez al explicar sus ‘éxitos’.
Bono social eléctrico
Una de las medidas de las que más ha alardeado el Ejecutivo socialista, la del bono social eléctrico, también ha sido recordada este miércoles por Sánchez.
Este mecanismo ofrece una rebaja del 25% en el recibo de la luz a personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
Sin embargo, el incremento del precio de la luz ‘elimina’ la reducción de la que se benefician más 582.000 consumidores.
En concreto, la factura acumulada durante estos primeros ocho meses de 2021 será de 546,25 euros, frente a los 437,85 euros que representaron el pasado año hasta agosto. Se trata así de un sobrecoste de 108,4 euros, lo que supone más de un 25% más.
Pero, el espectacular incremento del precio de la luz ha hecho que los 582.851 consumidores vulnerables acogidos al bono social en marzo, según el último Boletín de Indicadores Eléctricos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) tengan que pagar lo mismo que una persona que no se beneficiaba de esta prestación el pasado año.
Fondos europeos
Al disertar sobre los fondos europeos de recuperación por el Covid, señaló que servirán, entre otras cosas, para impulsar la colaboración público-privada con los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) y recordó que se aprobó el del coche eléctrico y en meses se dará luz verde a otros.
El Gobierno movilizó 4.300 millones de euros para el desarrollo del PERTE de la automoción, una iniciativa que tiene como objetivo la transición hacia el vehículo eléctrico y conectado, y que contempla un conjunto de actuaciones que garantizarán la existencia de infraestructuras, instalaciones y mecanismos para su fabricación, pero para la que el Ejecutivo destinará el trabajo de 8 ministerios, tal y como avanzó este diario.
No obstante, desde las patronales de la automoción avisan de que esta medida es insuficiente para hacer frente a la crisis que se enfrente al sector de la automoción tras el impacto de la pandemia y piden al Gobierno de Sánchez que el PERTE se acompañe de otras medidas para mantener nuestra competitividad trabajando en mejoras laborales, logísticas y energéticas con el objetivo de relanzar al sector.
Créditos ICO
En su discurso, también alabó los créditos ICO ante la pandemia y cómo han “salvado a miles de empresas” como su fuera el Estado el que presta a las compañías y los autónomos, a pesar de que son los bancos los que prestan el dinero y el Estado el que los avala, y no tendría que desembolsar nada si se devuelven en tiempo y forma.
Datos macro de España
Al hablar de datos macro de España, cuya deuda pública está también en máximos y ha superado el 122% del PIB, siendo el país dónde más ha caído el Producto Interior Bruto desde mediados de marzo de 2020, volvió a utilizar el truco de comparar en tanto por ciento las caídas con las subidas.
Recordar que el PIB de España bajó un 21% en 2020, para decir después que crece ahora un 20% (se incrementó un 19,8% en el segundo trimestre del año frente al periodo entre abril y junio de 2020, tras acumular varios trimestres de caídas interanuales), puede llevar a equívoco al interpretarse que crece lo mismo que antes bajó.
No es la primera vez que Sánchez esgrime en sus discursos que “estamos mejor o igual que antes” señalando al hablar de datos económicos que se ha registrado un porcentaje de subida igual que el precedente de bajada.
Cuando un dato baja de 100 a 80 ha retrocedido un 20%, pero si luego sube un 20% desde ese 80, se situaría en 96, no en el 100 inicial, como parece que deja entrever Sánchez en sus intervenciones.