La rescatada Duro Felguera culpa a la política de Sánchez con Marruecos de sus problemas en Argelia
Duro Felguera, compañía asturiana de ingeniería que fue rescatada con 120 millones de euros de dinero público a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en 2021, achaca a la política de Pedro Sánchez a favor de Marruecos los problemas que ha tenido en los proyectos que desarrolla en Argelia, país que rompió relaciones comerciales con España después de que Sánchez se posicionara en 2022 a favor de Marruecos en el conflicto del Sáhara Occidental.
En su informe financiero de 2023, Duro Felguera señala que «el incremento del coste del gas y de las materias primas derivada de las guerras de Ucrania y de Gaza junto con la crisis diplomática con Argelia supone desafíos relevantes para las economías europeas y especialmente la española, todavía muy dependiente energéticamente de terceros países, afectando de modo significativo a los nuevos proyectos acometidos en 2023″.
En concreto, Duro Felguera, donde hasta ahora había dos ex ministros socialistas en el consejo, Valeriano Gómez y Jordi Sevilla, se refiere al proyecto en Djelfa. Se trata de la construcción de una central de generación eléctrica a gas en ciclo combinado en esta localidad, situada 300 kilómetros al sur de Argel. Este proyecto, firmado en 2014, ha pasado por muchos problemas, se ha paralizado por diferencias contractuales, pero también ha sido clave la política de Sánchez en el Sáhara.
Según reconoce Duro Felguera, en manos ya de inversores mexicanos que controlan el 54% del capital, el proyecto se encontraba paralizado desde el 22 de marzo de 2020 y se reactivó a finales de 2021, tras la firma de un protocolo de actuación con los argelinos. Pero esa reactivación se frenó de nuevo a partir de marzo de 2022.»Desde marzo de 2022 el ritmo de ejecución ha sido menor del previsto derivado del contexto entre España y Argelia», señala la firma asturiana.
Duro Felguera insiste en su informe sobre el problema del millonario proyecto de Djelfa en Argelia. «El proyecto sigue en ejecución desde su reactivación a finales de 2021, tras la firma de un protocolo con el cliente. No obstante, el ritmo de ejecución ha sido menor del previsto, derivado de la falta de progresos en las negociaciones sobre reconocimiento de reclamaciones económicas como consecuencia del contexto político entre España y Argelia acaecido en dicho mes de marzo de 2022», señala.
En estos momentos, Duro Felguera y su cliente en Argelia «siguen negociando un acuerdo que permita la extensión del plazo de entrega global de ejecución, que ya ha expirado, y ponga fin a sus reclamaciones económicas de costes adicionales en la ejecución, esperándose fructifiquen próximamente. En este sentido, existe a la fecha incertidumbre en cuanto al resultado final de la negociación», explica la compañía. «El efecto final en las cuentas anuales consolidadas adjuntas derivado de esta situación no puede determinarse», finaliza.
Duro Felguera es una de las compañías perjudicadas por el giro radical de Sánchez sobre la histórica posición de España en el conflicto del Sáhara Occidental. En 2022, Sánchez decidió apoyar la tesis de que ese territorio es marroquí, abriendo un conflicto diplomático con Argelia que ha costado miles de millones a las empresas que exportaban sus productos a ese país.
A cambio, Sánchez inició una campaña para fomentar las exportaciones a Marruecos. Sin embargo, las cifras que publica mensualmente el Icex señalan que lo perdido con Argelia es más que lo ganado con Marruecos. Recientemente, Argelia ha abierto su mercado a ciertos productos españoles, lo que ha elevado las exportaciones españolas al país.