CEOE acusa al Gobierno de manipular las cifras del impuesto de Sociedades para equivocar a la sociedad

Pedro Sánchez
Pedro Sánchez, junto a Reyes Maroto.
Borja Jiménez

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha acusado al Gobierno de manipular cifras para obtener rédito político. Concretamente, la patronal empresarial se refiere al dato que la Agencia Tributaria (AEAT) expuso hace unos días, que reflejaba que el tipo efectivo que pagan en impuesto de sociedades las 134 multinacionales españolas que facturan más de 750 millones era de sólo un 12,6% de su beneficio global. Un dato que, a ojos de CEOE, trata de dar una imagen distorsionada de la realidad.

Desde diciembre de 2018 y con carácter anual, la Subdirección General de Estadísticas de la Agencia Tributaria viene publicando una estadística denominada Cuentas Anuales Consolidadas del Impuesto sobre Sociedades. Sin embargo, la Agencia Tributaria ha decidido elaborarla por iniciativa propia justificando su necesidad en una «demanda social». El objetivo del proyecto, según la AEAT, pasa por obtener una visión íntegra del impuesto sobre sociedades «desde el punto de vista recaudatorio, conectando la liquidación del impuesto del Régimen de consolidación fiscal de los grupos con la información individual que proporcionan las empresas dominantes y dominadas que lo conforman».

Sin embargo, desde CEOE recuerdan que las variables de tipos efectivos tienen una «notable repercusión mediática» y, por lo tanto, «deben elaborarse con rigor y transparencia y con metodologías estandarizadas que sean comparables internacionalmente, para asegurar que las estadísticas reflejen la realidad y no ofrezcan datos sesgados». Es decir, justo lo contrario a lo que la AEAT ha hecho.

Uno de los requisitos para conseguir calidad estadística es que las bases de las operaciones sean exhaustivas (que no se depure información que refleje parte de la realidad de forma injustificada), y que la metodología tenga rigor científico y matemático. Por ello, a ojos de la institución que preside Antonio Garamendi la Agencia Tributaria, «lejos de lograr el objetivo perseguido de reflejar la aportación real a los ingresos tributarios del conjunto de sociedades, con la publicación de estos datos ofrece una imagen poco precisa y distorsionada de la tributación de las empresas».

Tipos efectivos

Entre las variables de estudio de la AEAT se encuentran los tipos efectivos, que son la variable objeto de esta explotación estadística. En este sentido, se calculan dos tipos efectivos: uno como porcentaje de la cuota líquida sobre la base imponible positiva y otro como porcentaje de la cuota líquida entre el “beneficio bruto”. Pues bien, este “beneficio bruto” es una magnitud introducida novedosamente por la Agencia Tributaria y que se calcula mediante la suma del resultado contable positivo individual de las empresas que forman un grupo consolidado, con lo que no compensa los resultados contables negativos obtenidos por las sociedades del mismo grupo.

«Estos indicadores arrojan, necesariamente, resultados muy distintos, ya que para su cálculo se usan dos denominadores muy diferentes. En el caso del tipo efectivo sobre el beneficio bruto, el porcentaje calculado no es en absoluto indicativo de la aportación real de las empresas a los ingresos tributarios del Estado, al contrario, la información facilitada por este ratio desvirtúa la realidad», explica CEOE, que se basa fundamentalmente en tres errores cometidos por la Agencia Tributaria a la hora de elaborar el informe.

El primer error que a ojos de CEOE ha cometido la AEAT es que se incrementa, «artificial e incorrectamente», el resultado de los grupos consolidados, puesto que se suman los resultados contables individuales positivos sin restar los negativos. Es decir, que dentro de un grupo consolidado sólo se tienen en cuenta las sociedades que presentan resultado contable positivo, obteniendo así una cifra incorrecta y, en todo caso, superior al resultado contable consolidado.

En segundo lugar, la patronal alega que el informe incluye los resultados obtenidos por las filiales del grupo en el extranjero que ya han tributado en otros territorios y que están exentos de tributación en España. «Si se quieren incluir estos resultados, habría que tener en cuenta también el impuesto pagado en dichos territorios», expone CEOE.

El tercer gran error que bajo el punto de vista de CEOE ha cometido la AEAT es que no han eliminado los ajustes por consolidación dentro de cada grupo, lo que supone «no reconocer el tratamiento del grupo consolidado como una única entidad a efectos del Impuesto sobre Sociedades, base del Régimen de Consolidación Fiscal». A fin de cuentas, estos ajustes «no constituyen un beneficio fiscal», ya que si no existiera el régimen de consolidación las empresas podrían alcanzar el mismo resultado mediante una fusión que integrara sus negocios en una única sociedad mercantil.

Este cálculo, por lo tanto, «eleva artificialmente la variable utilizada como denominador del ratio, alejándola del resultado real de los grupos consolidados, sin ninguna base técnica tributaria que la justifique y sin que exista internacionalmente ninguna metodología estandarizada que la dote de rigor y que permita su comparación entre países».

Por todo esto, CEOE acusa a la Agencia Tributaria de «incoherente» ya que da lugar a «un resultado erróneo y un mensaje equivocado para la sociedad», objetivos «contrarios a los perseguidos».

Lo último en Economía

Últimas noticias