El accionista díscolo de Sacyr reduce al 6,8% su participación tras perder la batalla con la cúpula
Sin prisa pero sin pausa, en silencio, José Moreno Carretero, el accionista de Sacyr que planteó una batalla interna para restar poder a Manuel Manrique como presidente de la constructora, está deshaciendo posiciones en la compañía. Carretero ha reducido al 6,8% su participación en Sacyr, después de alcanzar casi el 14% de la firma y ser su primer accionista en 2018, en plena ofensiva contra la cúpula de la constructora.
De esta forma, Moreno Carretero pierde más peso dentro del accionariado de la firma y entierra definitivamente el hacha de guerra: ya es el tercer accionista y está a un paso de ser superado por la familia Fuertes. A cierre de septiembre, Beta Asociados -la firma de inversión de Carretero- mantiene ese 6,81%, desde el 7,1% de diciembre de 2018, mientras el Grupo Fuertes tiene el 6,31%.
El primer accionista sigue siendo Disa, propiedad de Demetrio Carceller, que mantiene un 12,61% según los registros de la constructora, y el segundo es José Manuel Loureda, que suma un 8,2% a través de las sociedades Prilou y Prilomi. Carceller ha reducido su presencia también en la constructora después de que en mayo de 2018 comprara en derivados un 3,6% de la empresa para frenar a Moreno Carretero.
Pasar página
Estos movimientos alejan casi por completo los tiempos de batalla interna en una de las grandes constructoras del país. Moreno Carretero intentó de cara a la Junta de 2018 que los accionistas aprobaran el nombramiento de un consejero delegado «joven y conocedor del sector» que limitara los poderes del presidente, Manuel Manrique.
Carretero llegó a ser el primer accionista de la firma con un 14,4% del capital en parte a través de derivados, lo que obligó a Carceller a adquirir un 3,6% extra para frenarle. Todos los consejeros se pusieron de lado del presidente Manrique, y los accionistas aprobaron que se aplicara contra Carretero la Acción Social de Responsabilidad, para lo que la dirección de Sacyr tiene cuatro años de margen.
Cerrada la batalla, y con Moreno Carretero en retirada de la firma, Sacyr ha dado un salto en los primeros nueve meses del año. Según los datos facilitados por la empresa a la CNMV, hasta septiembre ha obtenido un beneficio de 122 millones de euros, un 12% más, con unos ingresos de 3.032 millones, un 12% superior al del mismo periodo de 2018.
Además, la cartera de pedidos ha crecido un 2% hasta 42.616 millones de euros, un 72% fuera de España. El punto negro es la deuda, que ha aumentado en este periodo hasta los 4.634 millones. En una conferencia con analistas este jueves por la tarde Manrique ha señalado que lo importante es la deuda con recurso -la deuda corporativa que no está ligada a proyectos-, que se ha situado en septiembre en 1.082 millones, un 5% menos que a cierre de 2018. El compromiso es reducirla a menos de mil millones «en breve».