A Xavi no le sale la jugada de Piqué con Jordi Alba

jordi alba
Jordi Alba conecta con una pelota ante Fernando. (Getty)

Jordi Alba, al igual que Gerard Piqué, estaba en el saco de jugadores prescindibles para Xavi Hernández este verano. La intención de firmar a Marcos Alonso y la irrupción de Alejandro Balde desde la pretemporada, llevaron al club a pensar que el lateral podía ser una salida positiva en términos económicos y no muy dolorosa a nivel deportivo. De hecho, hubo un amago con la aparición del Inter de Milán que mosqueó al lateral, aunque quedó en nada. El catalán, cada vez que sale, hace ver al egarense que está para jugar.

En la gran noche de Gerard Piqué, en su adiós del Camp Nou, el partido de Jordi Alba ante el Almería fue de los mejores. Con un rival que apenas mostró deseos de enfrentar la idea y modelo de Xavi, el cuadro culé fue dueño y señor de la pelota y de las oportunidades de gol. El partido acabó 2-0 pero es cierto que pudieron entrar algunas de las muchas oportunidades que tiraron por la borda entre Ferran Torres, Dembélé y un Lewandowski que demuestra ser humano, también falla.

Alba fue un constante dolor de cabeza por la izquierda, desbordando y buscando constantemente la espalda de los rojiblancos, mostrando su punta de velocidad y demostrando que está a buen nivel, para jugar y ser competitivo. Desde su costado, en una buena asociación con Ferran Torres, llegó gran parte del peligro de los culés. De hecho, ya en la segunda parte, de su asistencia al punto de penalti nació el 2-0 de Frenkie de Jong, que aprovechó un rechace muerto en el área.

Fue su tercera titularidad consecutiva, principalmente por las lesiones en la zaga, pero tuvo oportunidad de mostrar una vez más que Xavi se equivocaba en su premisa inicial, dejándole a un lado. Balde ha comenzado el curso a un nivel altísimo pero es evidente que los casos del de L’Hospitalet y Piqué no son comparables. Había un tema económico potente en la decisión tomada por Xavi de darle menor peso a estos jugadores y sugerir su salida. Con ninguno funcionó aunque el central catalán ha acabado estos días por rendirse ante la evidencia, que estaba a la cola en cuanto a centrales.

Alba es el teórico tercer lateral zurdo tras la llegada de Marcos Alonso y la irrupción de Balde, aunque por el momento el recién llegado del Chelsea ha jugado más como central que como lateral y el canterano está siendo el lateral diestro ante la falta del mismo tras tanta lesión. Los minutos de Alba se están traduciendo en rendimiento, constancia y mucho peligro a nivel ofensivo. Sus continuas subidas por el costado derivan casi siempre en peligro. Lideró los ránking de pases completados ante el Almería (80) y también el de intervenciones (113). Sumó ocho recuperaciones.

El discurso de Xavi no funciona con él que está demostrando el porqué de su contundente rechazo a salir cuando llegó el Inter interesado en él. Fue en un momento en el que el Barça buscaba a la desesperada fórmulas para hacer hueco en el límite salarial, algo que no fue sencillo y acabó derivando en otra palanca más en el Camp Nou. No, Jordi Alba no es Piqué. Ahora está por ver si sus últimos partidos son suficientes para que Luis Enrique también le dé la razón a él y no a su entrenador y le lleve al Mundial de Qatar 2022.

Lo último en Deportes

Últimas noticias