La surrealista petición del ingeniero de Alonso que le provocó una carcajada en plena carrera

Fernando Alonso fue el gran protagonista del Gran Premio de Italia. El asturiano volvió a dar la nota en Monza, como hiciera hace tres años en el mismo escenario. Tras ser segundo con el Ferrari se hizo un selfie desde el podio. En esta ocasión los hechos ocurrieron en la pista, ya que el podio se le quedó a miles de kilómetros de distancia. Terminó en la posición 14 y después de tres paradas y varios errores del equipo que volvieron a perjudicar al español.

Los hechos se produjeron a pocas vueltas del final, uno por radio y el otro en la última vuelta. La FOM volvió a elegir al de McLaren-Honda para pinchar una de sus conversaciones de radio con sus ingenieros. Como es habitual, Alonso no defraudó. A falta de 10 vueltas para terminar la carrera, Mark Temple, el ingeniero de pista de Fernando, le animó a intentar atacar al Haas de Romain Grosjean, un coche más potente que el suyo. Le dijo que el francés estaba perdiendo gomas y que si pisaba a fondo le podía alcanzar.

Las palabras del británico desataron la risa del bicampeón del mundo, que respondió con un «jajajajaja». Una carcajada irónica puesto que Alonso ya le estaba pisando a fondo. De hecho, siempre exprime al máximo el bólido desde la vuelta de calentamiento hasta que cruza la línea de meta al final de la carrera. El asturiano no se podía creer lo que estaba oyendo.

Más tarde, volvió a aparecer para hacer magia con el coche. Por si no quedaba claro que estaba apretando el acelerador al máximo, a falta de tres vueltas cambió de neumáticos, puso un juego de superblandas y marcó la vuelta rápida de la carrera en el último suspiro tras parar el crono en 1:25.340. Una machada histórica que jamás había conseguido McLaren en tres años. Además, es la primera del asturiano desde que firmara con los ingleses. Pese a llevar 22 en total, no lo lograba desde Abu Dabi 2013.