Serbia interviene y exige a Australia la liberación de Djokovic

Novak Djokovic continúa retenido tras su llegada a Australia, donde pensaba participar en el Open de Australia que se celebra entre el 17 y el 30 de enero en Melbourne. El número uno del ranking ATP, que no ha anunciado el cumplimiento de la norma de pauta de vacunación completa para participar en el torneo pero sí contaba con una exención médica, ha convertido su situación en un asunto de estado, y el ministro de asuntos exteriores de Serbia ha comparecido para exigir su liberación inmediata.

Nikola Selakovic pidió a su embajador en Canberra, según el rotativo Informer, la puesta en libertad de Djokovic alegando que puede entrar en el país oceánico con normalidad. Nole acumula ya varias horas detenido y con la madrugada en Australia no parece lo más sencillo para poder circular hacia el fin de su retención y una solución con respecto al culebrón sobre su estado de vacunación y participación en el Open de Australia.

Djokovic aterrizó en el aeropuerto de Melbourne alrededor de las 14 horas del miércoles con el permiso para participar en el Open de Australia, pero también con la polémica circulando sobre un agravio comparativo y un quebrantamiento de la norma que obliga a tener la pauta de vacunación completa para participar en el torneo. Todo ello, en uno de los lugares con mayores restricciones con el coronavirus en todo el planeta.

A todo ello se sumó un problema con el visado del número uno del ranking ATP, que no habría sido la que permite las exenciones médicas como la que obtuvo Djokovic en una decisión más que polémica por parte de Tennis Australia, empresa organizadora del Open. Jaala Pulford, ministra de deportes del estado de Victoria, donde se encuentra Melbourne, negó el permiso para la entrada de Nole. «El Gobierno Federal nos ha consultado si aprobábamos la entrada de Djokovic con esa visa y les hemos dicho que no», afirmó, dando paso a otro nivel de polémica y que derivó en la retención del protagonista en el aeropuerto.

El primer ministro de Australia, Scott Morrison, también se pronunció sobre el caso. «Estamos a la espera de su presentación y de las pruebas que nos proporcione para respaldar su exención. Si esas pruebas son insuficientes, no se le tratará de forma diferente a los demás y estará en el siguiente avión de vuelta a casa. No debería haber reglas especiales para Novak Djokovic en absoluto», aseguró, incontestable, en unas declaraciones y retención que ahora se ven replicados por la aparición del gobierno de Serbia para reclamar la libertad de su deportista referencia.