A Villarreal con el once de La Undécima

Han tenido que pasar 275 días para que Zinedine Zidane pueda alinear el once de La Undécima. La sucesión de lesiones que han afectado a todos los jugadores del Real Madrid han impedido que el técnico pudiera disponer de su equipo ideal en ninguno de los 38 partidos oficiales que ha disputado el conjunto blanco esta temporada. En Villarreal, en un partido que puede ser decisivo para el devenir de la Liga, Zizou podrá alinear por fin al once titular de La Undécima.

La derrota en Mestalla obliga al Real Madrid a ganar en el estadio de La Cerámica para seguir manteniendo su privilegiada posición de líder de la Liga con un partido menos que sus perseguidores. Además, los blancos saltarán a jugar contra el Villarreal después de que conocer el resultado del Atlético-Barcelona del Calderón. Si los azulgranas logran la victoria, el equipo de Zidane saldrá exigido y presionado para mantener el liderato. Si el Barça pincha, será una ocasión ideal para que el Real Madrid vuelva a meter tierra de por medio.

Como el partido tiene sabor a final, Zidane irá con todo ante el Villarreal. La base del equipo será la misma que jugó en Mestalla y sólo habrá dos retoques: Pepe entrará por Varane al centro de la defensa y Bale ocupará su puesto para que la BBC emita al completo y desde el inicio en el decisivo partido del próximo domingo.

El bloque que cayó en Mestalla

El resto del equipo serán los mismos que jugaron en Mestalla. Keylor Navas sigue contando con la confianza de Zidane, a pesar de que sus fallos están despertando dudas en el club sobre su futuro, y tampoco tocará Zidane ni el grueso de la defensa (Carvajal-Ramos-Marcelo), ni su tridente ideal de centrocampistas: Casemiro, Kroos y Modric.

Pepe, que ya fue titular ante el Espanyol, recupera su viejo lugar de acompañante del capitán Ramos, mientras que Bale, despues de dos partidos de rodaje tras tres meses de lesión, ya está listo para jugar de inicio precisamente en el campo en el que debutó en la Liga, aunque probablemente el galés no dispute los 90 minutos.